Alas Libres, Capital de Áeronima.
74Please respect copyright.PENANAxGcmrHZ033
Un profundo estruendo se hizo presente en la ciudad más grande de todo el continente del elemento viento. Si bien Áeronima poseía tecnología y armamento militar, era mucho más escasa y atrasada que la de sus invasores, por lo que el ejército se encargaba de defender las tierras con sus poderes que fueron otorgados por el guardián de dichas tierras.
74Please respect copyright.PENANAX0ZPERZQ63
Dentro del castillo, una muchacha de cabellera negra que caía por debajo de sus hombros buscaba algo en su guardarropa. Cuando era pequeña, su padre le insistió constantemente en guardar aquel objeto. Era de suma importancia cuidar de aquella roca ovalada de textura lisa, ya que, supuestamente, contenía al guardián que fue encontrado en Ventoleza, otra de las grandes ciudades de estas tierras bajo asedio.
74Please respect copyright.PENANATABxsIGPgU
La chica tomó también un colgante que contenía en su interior una fotografía de sus padres. Su mamá había fallecido cuando ella era una niña pequeña, y desde entonces, su padre, el rey del continente, había buscado una nueva figura materna para la jovencita, sin saber que ella realmente no había deseado un reemplazo para su madre. Ella restaría importancia a que su padre contrajera matrimonio una segunda vez conforme creció.
74Please respect copyright.PENANAMRp92v86Tm
Entonces, un hombre en sus treintas de llegó. Su cabello era azul oscuro, además de largo y se encontraba acomodado en una cola de caballo. Vestía un uniforme militar en color verde. Tenía un atractivo rostro que desplegaba cierta bondad y fiereza. Una cicatriz se pasaba a la mitad de su ceja derecha, hecha por una herida de combate con la que tuvo suerte de que no fue más grave.
74Please respect copyright.PENANAwMhuaMSmoh
—¿Estás bien, querida hermana? —inquirió el masculino con un tono de voz suave, y preocupación por aquella chica con la que compartía un lazo sanguíneo.
74Please respect copyright.PENANA8bms0gDaej
—No estoy segura de querer hacer esto, Wyndham —respondió la chica, ya que sería enviada lejos de su familia y esto la llenaba de incertidumbre.
74Please respect copyright.PENANAnInx4rNoCf
Wyndham colocó sus manos sobre los hombros de su pequeña hermana. La muchacha era de estatura promedio, y rondaba los dieciséis años. Era la menor, y única hija de entre los siete retoños que el rey tuvo con su primera esposa.
74Please respect copyright.PENANA0LElZjJtEo
Su nombre era Ivonne, además de que era hábil con el arco, aunque también lo era con pequeñas dagas, debido a que era una chica muy ágil. Su nombre parecía hacer un juego perfecto con sus destrezas, algo de lo que ella estaba muy orgullosa.
74Please respect copyright.PENANAOa4Z8Xjz9g
Con aquellos puntos fuertes, la chica se había ganado la confianza de su padre para salir en búsqueda de sus aliados en una de las tierras vecinas llamada Terradamar, el continente del elemento tierra y también un lugar con el que poseían una alianza.
74Please respect copyright.PENANAFIOv2DAAE1
A pesar de la fe depositada en ella, la joven princesa no se sentía muy animada de irse lejos a un lugar desconocido por completo para ella. Esto la hacía sentirse repleta de desasosiego e impotencia. Ella pensaba que su deber era el luchar en compañía de sus hermanos.
74Please respect copyright.PENANATOtlcQiKri
Entonces, Wyndham le dedicó una sonrisa, además de algunas palabras de aliento. Sabía que no sería fácil para Ivonne el tener que dejar su casa, a su familia, y todos esos recuerdos juntos.
74Please respect copyright.PENANAv1VURcYPZM
—No quiero hacerlo —comentó Ivonne con una mirada que emanaba tristeza—. ¿Por qué no vas tu, hermano?
74Please respect copyright.PENANA3zaMc7XtKC
—Porque nuestros hermanos son estúpidos —replicó el mayor—. Ivonne, nuestro padre y la gente de nuestra querida Áeronima saben bien que soy el sucesor al trono.
74Please respect copyright.PENANAk6eL9z7XWo
»Si algo le sucediera a nuestro padre, y yo no me encuentro en casa, Áeronima entraría en caos, hermanita.
74Please respect copyright.PENANADuXqSOYe5E
La mina sabía que Wyndham estaba en lo cierto. Él era muy respetado y admirado por toda la gente del continente debido a sus hazañas en la guerra contra los hombres de Volcabrama y Océanova. Su hermano era el mayor de sus tatos varones, siendo la chica la única fémina y la menor de su familia. Ella los admiraba mucho, y a pesar de ser una mujer, solía llevarse rudo con ellos o algunos jóvenes que intentaban cortejarla.
74Please respect copyright.PENANAM4vvCsxUHr
El joven príncipe notó la angustia que acompañaba la mirada de la muchacha, y le recordó lo importante que era tener la ayuda de sus aliados en la guerra, ya que los enemigos eran las otras dos tierras vecinas. Necesitaban refuerzos y apoyo en una guerra que podrían dar como perdida si los otros dos continentes usaban a sus guardianes.
74Please respect copyright.PENANAUoIPewN9JX
—Te contaré un secreto, Ivonne —proclamó el mayor, tomando la suave mano de su tata—. Dentro del castillo tenemos un sistema de túneles que nos permitirán llegar pronto a nuestro destino. Ya que esto es algo que sólo he compartido contigo, no se lo digas a nuestros tontos hermanos.
74Please respect copyright.PENANAV80KUopqGw
»Esos zopencos los usarían para perder el tiempo o hacer marranadas con algunas doncellas.
74Please respect copyright.PENANAwd8OEq4f3W
—Eso último es asqueroso —protestó la chica ante aquel último dato.
74Please respect copyright.PENANA0vq1UtkfSM
En ese instante, la joven se acomodó el cabello hacía atrás y quedó en una especie flor.
74Please respect copyright.PENANAm4dKYJ6o4z
—Es por esto que te pido que no confíes este secreto a nadie, salvo a los futuros hijos que sé que tendrás, Ivonne.
74Please respect copyright.PENANAWrZLoRxQn2
«Si es que llego a tenerlos», pensó la jovencita.
74Please respect copyright.PENANAN1kFeq2oj6
Y con estás palabras, el par de hermanos caminó dentro del castillo. El piso poseía una alfombra en color verde con algunos detalles fabricados con hilos dorados y amarillos. También se podían ver algunas armaduras decorativas y cuadros con bellos paisajes o personajes importantes del pasado del continente. Tanto reyes, héroes y otros destacados se hallaban en esas pinturas. Los dos giraron a lo que parecía ser un espacio vacío, y fue el mayor quien indicó que estaban en el lugar correcto. Él presionó un botón que Ivonne no había notado antes y dijo que descenderían hasta las antiguas mazmorras del castillo.
74Please respect copyright.PENANAs8ycE2BRJH
El lugar estaba en completo abandono. Contaba con un olor a moho y pobredumbre. También era completamente audible el sonido del eco de gotas de agua cayendo en el suelo. A los pies de los hermanos corría un pequeño arroyo, cuyo tamaño lo hacía casi imperceptible al ojo humano.
74Please respect copyright.PENANAF4xRpA60ay
—Muchos animalejos vienen a encontrar guarida y muerte por estos lares, Ivonne.
74Please respect copyright.PENANAlK5qXcSl0o
—Puedo soportarlo, Wyndham.
74Please respect copyright.PENANAjJZTa4gpt3
Después, el mayor comentó a Ivonne que había escondido algunos suministros más adelante. A pesar de que Alas Libres estaba conectada con las cercanías de Ventoleza, el camino les llevaría tres o cuatro días a pie.
74Please respect copyright.PENANArCrmJKHxK1
«Otra de las razones por las que no quiero que encuentren a Ivonne, se debe a que ella carga una gran esperanza para nuestro pueblo», meditó el príncipe de Áeronima.
74Please respect copyright.PENANASevZ3NjTax
Y así, ambos avanzaron un poco. Wyndham tomó de la mano a su hermana, y ella protestó.
74Please respect copyright.PENANAV3LdNE5OP4
—Ya no soy una niña.
74Please respect copyright.PENANATnIGRSbXso
—Eres mi pequeña hermana, y mi deber es protegerte, tontita —afirmó el hombre—. El camino también es viejo, y cualquier cosa puede pasar.
74Please respect copyright.PENANAF6nPGp0R1K
Justo en ese instante, ambos hijos del rey sintieron que el suelo se sacudió, por lo que el mayor invitó a la muchacha a avanzar con cuidado.
74Please respect copyright.PENANAITkGoj8job
Además, con cada paso, todo se volvía más oscuro y siniestro. La chica desconocía si había criaturas peligrosas, así que estar al lado de su hermano mayor la hacía sentirse protegida.
74Please respect copyright.PENANA94K5nJC7om
—¡Viento luminoso! —exclamó Wyndham.
74Please respect copyright.PENANAOAmNYtQqmH
Una ventisca que desplegaba una hermosa luz verde apareció sobre la mano derecha del sucesor al trono. Era algo que solamente él podía hacer, pues le había costado años de entrenamiento lograrlo.
74Please respect copyright.PENANAXCLY1j9nkt
—En un tiempo tendremos que tomar un descanso, Ivonne.
74Please respect copyright.PENANAaVQPll3HtD
Wyndham sabía bien que aquella técnica que usaba dependía de su resistencia. Para recargar energía, debía descansar y comer algo. Por eso también había previsto el dejar alimento más adelante en una de sus expediciones anteriores por el lugar.
74Please respect copyright.PENANADQok7Zf9Mi
Con el sonido de roedores y algunos pequeños reptiles a la vista, el par continuó su travesía por unas horas hasta que Wyndham anunció que debían descansar un poco.
74Please respect copyright.PENANAIBmAlfuF3H
Fue así que aquel ligero viento desapareció de la extremidad del príncipe.
74Please respect copyright.PENANA5yafuRQCNX
—Dime Ivonne, ¿en qué piensas?
74Please respect copyright.PENANAjPTQMYu03T
—En papá, en nuestros hermanos, en nuestra gente. ¿De verdad debo hacer esto yo sola?
74Please respect copyright.PENANAqncS1cgynk
Meses atrás, el rey pidió personalmente a Ivonne que fuera al continente vecino para solicitar su ayuda. Las constantes invasiones de los soldados de Volcabrama y Océanova dificultaban cada vez más la resistencia de los hombres de Áeronima. Los pequeños pueblos quedaron devastados, obligando a los sobrevivientes a emigrar a las ciudades, aunque estas también recibían duros golpes por parte del enemigo.
74Please respect copyright.PENANAvMgFL57JrW
Además, la chica no era muy conocida por los invasores, lo que le daba cierta ventaja para no ser reconocida como la princesa del continente del elemento viento.
74Please respect copyright.PENANA9K0salwdtE
—Ivonne, lo único que te pido es que seas fuerte. Yo tengo confianza en ti. La vida es injusta, pero, ya te lo he dicho: Eres mi hermana, y un gran orgullo para mí.
74Please respect copyright.PENANA3WqFzKFPN0
La muchacha quería creer en su hermano, pero tenía miedo de fallar, o de no regresar con éxito a su hogar, ya que los hombres de Océanova atacaban en las aguas. Sabía bien que para tener una mayor oportunidad de llegar a salvo a Terradamar, tendría que hacerlo desde el aire, pero había una interrogante importante.
74Please respect copyright.PENANAsgWDQdzFV7
«¿Y si la tecnología de Terradamar no era la suficiente para hacerla volver a casa», reflexionó, mientras Wyndham le pedía mantener la calma.
74Please respect copyright.PENANAfiMEirO2vS
Ambos descansaron un poco más, hasta que el mayor sintió que podía volver a alumbrar el camino, y continuando su andar hasta dar con las provisiones que había dejado Wyndham en el camino. Estas permanecieron intactas debido a una técnica que el hombre se negó a compartir. Él quería que cada uno de su hermanos fortaleciera sus propias destrezas, así que le gustaba practicar a solas. Este hecho les dio la oportunidad de tomar un bocadillo antes de avanzar todavía más.
74Please respect copyright.PENANAJ4EmTO9Gxe
El recorrido por aquellos túneles prosiguió por un par de días más. Ivonne sintió que la luz al final del camino era incómoda para su vista, por lo que su hermano aprovechó para decirle que era completamente normal tras estar en un ambiente oscuro y tenebroso. La muchacha no supo responder a aquello, y de la nada, escuchó una voz susurrando en su cabeza.
74Please respect copyright.PENANA21SeaPItoo
Dicha dicción parecía llamarla por su nombre, provocando una sensación de fastidio en la chica.
74Please respect copyright.PENANArZw0TUByVj
—Ivonne, no me ignores. Te he escogido a ti, la hija del rey, para ayudarme a reunirme con mi viejo amigo, el dragón que protege las tierras del continente Terradamar.
74Please respect copyright.PENANAVVv2XRWyYJ
Ivonne se percató de que se hallaban a las afueras de un templo cercano a uno de los pueblos más modestos de Áeronima, y que también se encontraba muy cerca de Ventoleza, su destino.
74Please respect copyright.PENANANFinIchIbD
—¿Recuerdas cómo hacer volar esas raras máquinas que papá mandó a construir, hermanita? —cuestionó el príncipe.
74Please respect copyright.PENANAmprT0I8E0R
La jovencita asintió con la cabeza y una mueca repleta de una angustia que le llegó hasta la boca del estómago. El momento de dejar a los suyos estaba cada vez más cerca, aunque ella no quería hacerlo.
74Please respect copyright.PENANAGIqjAhjgEv
—Ivonne, sé que tienes tus preocupaciones —susurró aquella voz desconocida—. No dejes que las emociones de desconcierto inunden tu hermoso corazón, muchacha.
74Please respect copyright.PENANA24wROfIvLW
—¿Quién eres? —Ivonne adoptó una pose defensiva. Tomó sus dagas, en espera de la aparición de algo o alguien.
74Please respect copyright.PENANA5t6HSgzvFe
No hubo respuesta. Wyndham la miró con preocupación, aunque mantuvo la cautela por si era necesario proteger a su hermana pequeña. El corazón de la mina se llenó de asombro en el momento que la voz se reveló como el ave que protegía su tierra de origen, tras ser testigo de la inquietud de los hijos del rey.
74Please respect copyright.PENANARGNuvcyLJW
—Ustedes dos, los herederos de la sangre del viento, mi deber es observar si son dignos de mi presencia física. Para ello, deben abrir sus corazones a aquello que tanto anhelan.
74Please respect copyright.PENANAYHMhX4IFyL
El mayor sintió una muy grata y reconfortante sensación que aliviaba todo rastro de inquietud dentro de su alma. Aquello que más deseaba, era cuidar de su gente, y ver que su hermana creciera feliz. Al ser la única fémina entre siete bendiciones del gobernante de Áeronima, se sentía con el deber de protegerla de todo mal. También, había un secreto que Ivonne no conocía. Ella había sido prometida a un príncipe del continente al que viajaría. Tal vez ellos se encontrarían para un día, contraer el matrimonio que fue arreglado cuando el par referido era tan sólo una pareja de bebés.
74Please respect copyright.PENANAswvuxtE7pe
Así, Ivonne podría estar en un mejor ambiente, o tal vez, Terradamar había pasado por una situación peor que la de Áeronima, y por ello habían perdido toda comunicación durante poco más de una década.
74Please respect copyright.PENANAOU8Sw6B3nu
—Lo lamento —expresó Wyndham con el rostro repleto de zozobra—. Ivonne es la mejor opción. Confío en que ella se abrirá a lo que tanto anhela.
74Please respect copyright.PENANAMjfW5Drupk
¿Qué era aquello que deseaba la jovencita?
74Please respect copyright.PENANAXGTIsaLkjz
Su máximo deseo era algo tonto. Quería conocer al amor de su vida. Ella recordó con esmero las historias de caballeros que salvaban a princesas en apuros que le fueron contadas por su padre. También, sus ojos se llegaban a iluminar cuando el rey le leía el contenido varias de las cartas que escribió para su madre, una joven de alta alcurnia que provenía de Simúneta, otra de las grandes ciudades de Áeronima.
74Please respect copyright.PENANAMVtFxACK3c
El hombre no solamente compartió anécdotas sobre aquellos escritos. También lo hizo con otro contenido de estos. Eran poemas dedicados a la belleza y bondad incomparable de la madre de Ivonne.
74Please respect copyright.PENANAI0o7lIgMI8
Esto le hizo creer en el amor, y pensó que un día, ella encontraría a un buen pretendiente que devolviera el brillo a su sonrisa; empero, la guerra amenazaba cada vez más la paz de su tierra, y la tranquilidad de su corazón.
74Please respect copyright.PENANAX4S7flWy2t
—Voy a detener esta locura con mis propias manos —afirmó—. Voy a regresar a casa con toda la ayuda que papá necesita.
74Please respect copyright.PENANA8UAzoOw2E5
Aunque no podía verlo, el Gran ave de Áeronima no podía de dejar a un lado la preocupación y compasión que sentía por la mina. Ivonne no quería aceptar, que aquello que tanto anhelaba, era ser amada por un buen sujeto. Quería conseguir la paz y tener su propia familia al lado de un hombre de buen corazón.
74Please respect copyright.PENANAxmjdiOPeLl
Y entonces, la calma desapareció en el momento que se escucharon los gritos desesperados de los habitantes del pueblo cercano, al igual que el rugir de múltiples explosiones que tuvieron lugar en dicho lugar.
74Please respect copyright.PENANAE2VPpvoW27
—¡Tenemos que darnos prisa, Ivonne! —advirtió Wyndham.
74Please respect copyright.PENANACwPJLuDPnw
La muchacha corrió al lado de su hermano. Era el deber de ambos acudir al rescate de la gente inocente de ese pequeño poblado. Un olor a rosas comenzó a asaltar el sentido del olfato de los príncipes. Wyndham se asustó todavía más, ya que conocía bien aquel aroma. Se trataba de Yaco, uno de los comandantes del ejército invasor.
74Please respect copyright.PENANA09dyhpzlhO
Aquel hombre era rubio, de brillantes ojos azules, un rostro seductor, y por supuesto, bien vestido, a pesar de que toda prenda de vestir suya, fina o no, era de un color rojizo, en representación a su lealtad a la corona que se ubicaba en la capital de Volcabrama.
74Please respect copyright.PENANAu7pIMlFNLz
—¿Será aquella chica la princesa Ivonne? —cuestionó aquel hombre de peculiar aroma.
74Please respect copyright.PENANALiee6Sur5d
—¡Eso no te incumbe, rufián! —bramó la chica.
74Please respect copyright.PENANAdQBVNuLd8a
—Ivonne, debes huir de aquí —advirtió su hermano, apretando los dientes en señal de nerviosismo—. Nos encontramos ante Yaco, uno de los comandantes de Volcabrama, y también, un enemigo que ha provocado muchas bajas al ejército de nuestro padre.
74Please respect copyright.PENANA9AA4O7Iax4
Aunque Wyndham estuviera en lo cierto, la princesa no quería dejar solo a su hermano. Ella estaba preparada para apoyarlo en combate. En días previos, ella enfrentó a un par de soldados, además de que entrenaba en compañía de sus hermanos. Se había vuelto fuerte, y lo sabía muy bien; no obstante, Wyndham sabía que Yaco no era cualquier enemigo. Tenía uno de los rangos más altos por un buen motivo.
74Please respect copyright.PENANAY8EozfOyAK
La tensión que se respiraba en el ambiente era enorme, y para empeorar la situación, el hombre de Volcabrama notó que la jovencita y su hermano parecían estar equipados para un viaje.
74Please respect copyright.PENANASjAi2ru0OT
—¿Planean ir a algún lado ustedes dos? —cuestionó con la ceja derecha arqueada— No es habitual ver a la realeza de Áeronima fuera de la capital.
74Please respect copyright.PENANAumagrZ9yAq
Una sonrisa llena de malicia se dibujó en el rostro del peligroso rubio. Él estaba conectando lo que había a su alrededor, y así, dio con algo que hizo incrementar sus sospechas.
74Please respect copyright.PENANA1B8Yh7cmrS
—Ya veo. —Cerró los ojos—. En estos momentos, nos hallamos a una distancia cercana de dos kilómetros de Ventoleza, una ciudad repleta de tecnología que, si los reportes son ciertos, tendría algo que les permitiría ir a…
74Please respect copyright.PENANAYEvUFqZmpi
En su mente, Volcabrama no era una opción. El color de cabello de Wyndham, y la estatura de Ivonne, no eran algo usual entre los habitantes de su tierra de origen, aunque sí lo era en los esclavos que provenían del continente en el que se encontraba.
74Please respect copyright.PENANACHLhhFsSOq
«Irán a Océanova», reflexionó.
74Please respect copyright.PENANAcQZIEKtJuz
Aquella opción sería un suicidio, ya que las aguas estarían repletas de sus aliados, lo que pondría en desventaja a los hijos del rey. Parecía que había una única posibilidad.
74Please respect copyright.PENANAgih2zCGv4k
—Parece que irán a Terradamar —soltó Yaco, recobrando la sonrisa de momentos atrás.
74Please respect copyright.PENANARxAIWPkAnk
—¡Ivonne, debes irte ya! —ordenó Wyndham—. ¡No pierdas más tiempo! ¡Todos creemos en ti, hermanita!
74Please respect copyright.PENANAgsDN1gB4ch
—Parece que di en el clavo —expresó el comandante enemigo. No abandonó ni por un segundo la expresión maléfica en su rostro.
74Please respect copyright.PENANAy9eMk1ujlC
Ivonne sacó sus armas, dispuesta a pelear. Su hermano se puso adelante de ella. Le recordó que había algo más importante que debía proteger a toda costa. Dichas palabras se clavaron en su corazón como navajas. Wyndham tenía razón. Bajo su cuidado estaba el protector de Áeronima. Si llegaba a perder algo tan preciado y poderoso, las dos coronas enemigas obtendrían un poder sin igual.
74Please respect copyright.PENANA4VG5NtXRq5
Ivonne apretó los puños, al igual que los dientes. Un torrente de emociones la inquietaba. Quería luchar, pero sabía que era primordial evitar que el enemigo se hiciera con aquello que poseía.
74Please respect copyright.PENANAqF3XmDxtWD
—Ivonne, eres la única que me escuchará en esta ocasión, pero no olvides que tu hermano es fuerte también —manifestó el guardián de Áeronima—. Te dará el tiempo necesario para huir.
74Please respect copyright.PENANAvNxHqo1MRX
»He potenciado sus habilidades para que pueda darle una mayor distracción a ese hombre. Te pido que corras, ya que si encuentro a mi aliado de Terradamar, tendremos más posibilidades juntos en esta guerra.
74Please respect copyright.PENANAYLZiteWHBs
La princesa emprendió una carrera. Yaco, con una expresión maléfica, llamó a un par de perros del infierno a su cargo con el fin de atacar a la muchacha; empero, llegaron algunos soldados de Áeronima para ayudar, ya que también se libraba una batalla en el pueblo.
74Please respect copyright.PENANA0vjEk7zMpD
Y así, comenzaba un nuevo tormento para Ivonne. Tuvo que cruzar a toda marcha por aquel poblado bajo asedio. Los gritos de batalla y horror se mezclaban en una perturbadora danza de emociones desagradables junto con una mezcla de olor a algo quemado y sangre. El gran ave aseguró a la chica que también brindaba parte de su poder a los soldados del lugar para darles una ventaja sobre el enemigo.
74Please respect copyright.PENANAdi17AEjOxK
Por otro lado, Yaco también sospechaba que Ivonne iría acompañada del guardián de Áeronima. Era peligroso viajar a solas para una pequeña dama. Tendría que pelear con el heredero al trono para poder buscar a la chica.
74Please respect copyright.PENANA8C2mJmcv4U
[…]
74Please respect copyright.PENANA5NmpqwkcYO
Varios minutos más tarde, la mina entró a Ventoleza. Había visitado el lugar en el pasado, cuando bajo varios disfraces, sus hermanos la llevaron a ver la construcción de algunas máquinas voladoras a las que llamaron: avionetas.
74Please respect copyright.PENANALhvk6PSCUH
—Me encargaré de ayudar a que tengas un vuelo lo más seguro posible, pero también, hay una posibilidad de que el artefacto pierda mi influencia a medida que entramos a Terradamar —reparó el ave.
74Please respect copyright.PENANAHfvlsau3ow
Ivonne entró de golpe al sitio en el que se hallaban aquellos artefactos de alta tecnología que le permitirían viajar a buscar a los aliados de su tierra. Se apresuró a ponerse el traje especial, colocó el objeto en el que estaba el guardián en una de sus hombreras y dio órdenes de preparar todo para su salida.
74Please respect copyright.PENANAMRjWOvWPNS
—Me alegra ver que estás preparada para tu misión —declaró la voz del guardián—. Por ahora, me prepararé para…
74Please respect copyright.PENANAYW3GfLacbs
—Mi deber es hacer para ayudar a mi pueblo —interrumpió Ivonne—. También lo hago por mi familia por favor, préstame tu poder, ¡oh, gran guardián de Áeronima, bendice mi camino por tus dominios!
74Please respect copyright.PENANAI3SlWPOEca
La princesa sintió que una sensación cálida recorría su cuerpo. El gran ave había escuchado sus plegarias, pero permanecía en un misterioso estado que la chica no sabía cómo mejorar.
74Please respect copyright.PENANAVIRc3nSKs4
«¡Oh, Ivonne! No te cierres a la posibilidad de encontrar el amor. Después de todo, tu prometido podría encontrarse allá, en Terradamar», pensó el protector de Áeronima.
74Please respect copyright.PENANA3mhM4vlXBN
—¿Lista para el viaje, princesa? —inquirió el guardián.
74Please respect copyright.PENANAg41javDOeZ
—¡Nací lista! —replicó Ivonne con seriedad.
74Please respect copyright.PENANASOjDuut35W
—¿Y si te encuentras a un «amorcito» en Terradamar? —preguntó con cierto sarcasmo.
74Please respect copyright.PENANAlS7qnI9fSQ
—¡No voy a buscar un esposo a ese continente! —se quejó la chica, con el rostro en distintos tonos de rojo—. Mi deber es el de encontrar la ayuda que mi gente necesita. Si no hay nada más, me regreso a casa.
74Please respect copyright.PENANAdbBOdbkp0a
La chica se había avergonzado ante tal pregunta, aunque se cuestionó si realmente encontraría a un caballero que pudiera conquistar su corazón. Tal vez los aliados de su padre tendrían un hijo de una edad similar a la suya, o un poco mayor al cual le ofrecerían en matrimonio y…
74Please respect copyright.PENANAv8zeywBCxN
—¿Y si encuentras al amor de tu vida? —insistió el guardían.
74Please respect copyright.PENANAst6Lj425On
—¡Ya basta! —gruñó la chica, aunque en el fondo quería tener la dicha de aquella posibilidad.
74Please respect copyright.PENANASnPp5JqSlj
Y mientras tanto, a las afueras de un pequeño pueblo costero, un joven de cabello castaño y ojos verdes que respondía al nombre de Ian, era acompañado por una especie de masa verdosa y gelatinosa al que irónicamente, llamaba «Gelatín».