Capítulo 2: "La Confesión del Demonio: El Trueque de Almas"

Estando frente a Alicia Francisco le dijo:

Mi querida Alicia debo confesarte algo, tienes que olvidarte de mí no soy una buena persona, no soy quien tú crees, debes refugiarte en la iglesia hablar con un padre alejarte de mí, olvidarte de todo lo que hemos vivido no deseo lastimarte, tú me has mostrado y me has hecho sentir algo que yo había olvidado. El verdadero amor, ahora debo contarte quién soy mi querida Alicia te pido que no te asustes pero sí que me escuches hasta el final.

Soy un demonio vine del inframundo le pedí al Señor oscuro que me permita llevarle un alma inocente la más pura la más bella A cambio de un Rango en el inframundo. Y te encontré a ti me acerqué a ti con la intención de robarte el alma de llevarte al inframundo.

Esta noche debo llevarte al inframundo para entregarte al señor oscuro y recibir mi recompensa un Rango alto y un ejército, pero eso ya no tiene sentido para mí. Te pido me perdones me arrepiento de todo corazón por haberme cruzado en tu camino pero te agradezco El haberme enseñado el verdadero amor.

Alicia después de escuchar a Francisco abrió sus grandes y hermosos ojos verdes esmeraldas, aterrada por la confesión de Francisco, ella desconcertada sin saber qué hacer con la información que recibió salió corriendo en busca de su confesor, el Padre Antonio ella se dirigió a la iglesia. bañada en lágrimas se arrodillo rezando, llorando altísimo, el sacerdote Antonio se acerca a ella y le dijo:

Padre Antonio: Qué sucede Alicia por qué estás temblando así, cuéntame hija mía Qué te ha sucedido.

Alicia: padre Antonio me ha sucedido algo terrible, conocí a un joven hace un tiempo atrás salí con él conversábamos me enamoraba de él, ¡lo amo! ¡lo amo! con todo mi corazón y hoy me dijo que él es un demonio, de que se acercó a mí por mi alma y me dijo de que quería intercambiar mi alma por un Rango en el inframundo y que me debía entregar al señor oscuro.

Pero también me dijo que no quería hacerlo, que yo había despertado en él emociones que ya había olvidado, que le había hecho recordar lo que era un sentimiento puro. 

Lo único que pude hacer es salir corriendo y venir aquí a la casa de Dios A sentirme protegido, padre Antonio no sé qué hacer aconséjeme no puedo dejar de sentir el amor que siento en mi corazón por Francisco, estoy confundida qué hago dígame padre Antonio ¿ ¿Qué hago?

Padre Antonio: Alicia eres un alma pura, eres un alma buena, eres tan inocente, tan dulce que has tocado el alma de un demonio del inframundo, tú lo has traído a la luz si ese demonio te confesó lo que realmente es, fue porque no desea hacerte daño tenemos que rezar por él tenemos que pedir por su salvación.

Alicia: sí padre Antonio no quiero que arda en el fuego del inframundo, quiero ayudarte no sé cómo, pero quiero salvarlo yo lo amo ayúdeme recemos por él ayúdeme a salvarlo padre Antonio.

En ese momento Francisco entró a la iglesia y el padre Antonio se puso frente a él y le dijo, Dios te bendice hijo mío sé que vienes a este lugar en busca de ayuda dime ¿cómo quieres que te ayude hijo mío?

Francisco: necesito hablar con Alicia pero no se vaya padre quiero que usted esté presente. Mi querida Alicia no pienso lastimarte solo vine a despedirme regresaré al inframundo no puedo hacerte daño. Quiero que sepas que el castigo que me espera en el inframundo lo recibiré con gusto porque contigo ya a través de ti conocí el paraíso y así pase la eternidad entre las llamas siempre estarás en mi corazón y en mis recuerdos. 

Gracias por mostrarme el amor, la felicidad y la bondad que hay en ti Alicia y quiero que sepas que te amo. Adios mi querida Alicia sé que encontrarás un día el amor y serás muy feliz tendrás una larga vida llena de felicidad.

Alicia corrió hacia Francisco y lo abrazó fuertemente diciéndole, no no te vayas mi amor luchemos juntos. Te amo Quiero que sepas que te amo y no quiero perderte, por favor no te alejes de mí debe haber una forma, algun modo en el que puedas liberarte del inframundo.

Alicia le dio un beso a Francisco en los labios y el la estrechó entre sus brazos y el beso con intensidad como si quisiera que ese beso durara para toda la eternidad, el padre Antonio bendijo ese beso y su amor. 

En ese momento apareció el señor de la oscuridad y tomó el alma de Francisco atravesando con su mano el cuerpo de Francisco haciendo cenizas, atrapando su alma. Alicia aterrada retrocedió el padre Antonio la abrazó y mirando al señor oscuro le dijo: 

Padre Antonio: "Estás en la casa de Dios señor de la oscuridad retrocede" no eres bienvenido aquí, no tienes poder en este lugar, aléjate y el señor de la oscuridad dijo:

Señor de la oscuridad: solo vine por mi demonio fue por lo único que he venido, "pequeña Alicia" ¡tú podrías salvarlo! ¿Sabes lo que le espera a este pequeño e insignificante demonio? El arderá cada día y cada noche en el fuego del inframundo sin poder escapar de él.

Sentirá como su carne arde y se cae a pedazos todos los días sentirá el ardor y el dolor de sentir su carne arder y caer por las llamas del fuego del inframundo. "Pero pequeña" ¡tú podrías salvarlo!, solo si vienes conmigo Yo podría perdonarlo y dejarlo ir "te ofrezco su alma a cambio de la tuya Alicia" tú no arderás En ningún fuego tú solo estarás a mi lado en mi trono y en mi reino.

Alicia miraba con sus grandes ojos aterrados, miraba a Francisco, miraba su alma en manos del señor de la oscuridad mientras él presionaba el corazón de Francisco veía el dolor en él, y ella le decía por favor detente señor de la oscuridad.... Continuará.