Capítulo 3: "El Sacrificio de Alicia: El Amor que Triunfó Sobre el Inframundo"

No lo lastimes más, te lo suplico y el señor de la oscuridad soltó el alma de Francisco y Francisco cayó de rodillas con su cuerpo humano. Ella le dijo si voy contigo ¿lo dejarás aquí en este mundo? ¿Lo dejarás vivir? ¿Él podrá ser libre? y el día que muera ¿no regresará al inframundo? Debes prometer eso Señor de la oscuridad.

Señor de la oscuridad: por supuesto pequeña si tú vienes conmigo estarás salvando a Francisco, él se quedará en este mundo y el día que él muera no vendrá al inframundo porque no lo quiero cerca de ti, por eso no vendrá al inframundo Pero tú estarás conmigo por toda la eternidad.

Francisco aún de rodillas dijo "No Alicia" ¡no! te lo suplico. Este es mi destino no el tuyo. El padre Antonio tomó la mano de Alicia y la abrazó le dijo No Alicia. No hagas eso, sé que tu alma es bondadosa sé que eres una buena joven y sé que te sacrificarías por los demás sea Francisco o sea cualquier otra persona o cualquier otra alma que se hubiera cruzado en tu camino, pero no debes hacerlo Alicia.

Suavemente Alicia se soltó de la mano del padre Antonio, se acercó a Francisco se arrodilló frente a él, lo miró a los ojos y le dijo quiero que seas feliz Francisco quiero que vivas una buena vida con amor con bondad no permitiré que ardas en el fuego del inframundo por la eternidad.

El tratado de detenerla pero ella corrió a los brazos del Señor de la oscuridad y él desapareció con ella dejando un humo negro y un olor a azufre. Francisco trató de detenerla pero ya no estaba Alicia.

El cayó de rodillas llorando como un niño, el padre Antonio había estado rezando en todo momento no dejó de rezar y de pedir altísimo que viera el sacrificio de Alicia y se apiadara de ella y la ayudara.

El Señor de la oscuridad llegó al inframundo al cruzar la puerta solo pudo entrar él. Pero Alicia no pudo pasar las puertas del inframundo, él Señor oscuro salió la tomó de la mano y volvió a entrar pero al cruzar solo podía entrar él. 

Ella no podía traspasar las puertas del inframundo, en ese momento el señor de la oscuridad se dio cuenta del gran error que había cometido. Alicia empezó a irradiar una luz brillante, una luz que la envolvía y cada vez se hacía más y más brillante.

Cada vez el brillo era más intenso como un diamante que la envolvía y unos destellos se extendían, el Señor oscuro trato de acercarse a ella, pero cada vez que intentaba tocarla los destellos lo atravesaban Como un cuchillos.

Entonces se dio cuenta que el sacrificio de Alicia la protegía en ese momento esa luz brillante que le envolvía la elevó y la regresó al mundo de los humanos sin que el Señor oscuro pudiera detenerla.

Ella volvió a la iglesia apareció rodeada de esa luz brillante. Francisco y el padre Antonio se quedaron atónitos mirándola y fueron testigos del milagro del altísimo.

Cuando la luz se disipó Alicia cayó desmayada y Francisco corrió y la tomó En sus brazos y le dijo:

Francisco: mi amor Alicia.. mi amor abre los ojos por favor te lo ruego "Te amo" vuelve a mí amor mío te amo.

Él la besó y ella abrió los ojos sorprendida de verlo miró a su alrededor vio al padre Antonio y dijo ¿Qué sucedió? y el padre Antonio dijo un milagro Alicia un milagro.

Francisco la abrazó fuertemente y le pregunto ¿mi amor estás bien?, el padre Antonio mirando la imagen del altísimo dijo:

Padre Antonio: Gracias, este es un milagro del altísimo. Alicia tu sacrificio salvó a Francisco y te salvó a ti también.

El altísimo vio tu sacrificio y eso impidió que pudiera el Señor oscuro arrastrarte al inframundo. 

Es por eso que ha regresado ahora el Señor del inframundo no podrá tocarte y ella preguntó ¿y qué pasará con Francisco?. El padre Antonio respondió a él tampoco podrá tocarlo porque ya lo liberó así que los dos son libres.

El padre Antonio les dio su bendición y poco tiempo después Alicia y Francisco se casaron, formaron una familia y fueron muy felices todos los domingos iban a la iglesia y daban gracias al altísimo.

Y así Alicia y Francisco vivieron felices Nunca más tuvieron temor y el Señor del inframundo nunca más se pudo acercar a ellos, la felicidad reino en la vida de Alicia y nunca más estuvo sola y Francisco fue el hombre más feliz y dichoso al lado de la mujer que le enseño el amor....Fin