Del Diario de Demian Drago 12 de abril:
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Ha sido un mes terrible, ni siquiera tuve tiempo de escribir en esta cosa. Cronos me golpeo por días enteros hasta que pude frenarlo. Aun así en los tres encuentros que tuvimos me derroto. Al menos pude conocerlo mejor y saber que no es tan mal sujeto, es simplemente como un sádico profesor de educación física.
Nala ha estado faltando mucho a clases y las pocas veces que ha venido ni ha tratado de dirigirme la palabra. Honestamente no tengo buenas excusas y jamás le diría que soy un vampiro. Comprendo su molestia, yo también me enfadaría si mi mejor amigo cancela todos los planes que teníamos y se niega a darme explicaciones.
Malice se adaptó muy bien a la vida de estudiante mucho de ese crédito corresponde a Sam. No he vuelto a hablar con Maya. Pensé en inscribirme en su academia pero… no, no usare mallas y verme ridículo, pasaré por el momento de esa idea. Aunque la tuve suficiente tiempo en mi cabeza como para que Malice supiera ese plan y recibir un sospechoso paquete con unas mallas negras de hombre muy apretadas listas para usar.
A mediados de abril. Ya me acostumbré a esto aunque mi reloj biológico me pide ser nocturno no puedo cambiarlo, al menos no mientras estudie. Faltó un profesor así que estoy tomando la hora libre para ponerme al tanto con este diario, todo va bien es un día tranquil […]
—¿Qué haces Demian? —«Era tranquilo…» —¿Ese es tu diario? ¡Ves que eres toda una ternura! —Todo el salón de clases se concentró en mí por ese comentario.
—«Maldita enana tetona»Podrías por favor dejar de decir estas cosas todos nos están mirando.
Para empeorar mi suerte Maya pasó por la puerta viendo toda la escena justo en ese momento, pude escuchar claramente como una pequeña risa. Desgraciadamente esa no fue la peor de las vergüenzas de ese día. Ya había rumores no solo dentro del curso sino también en otros alumnos ajenos a nuestra clase de que éramos de esa “clase de primos”. Haría cualquier cosa por la que esos rumores no me hagan ser mal visto por Maya.
Al salir Kraven nos esperaba junto a su motocicleta, como siempre eso significaba entrenar con la pared de músculos. Subí a mi vehículo con Malice aferrada en mi espalda siguiéndolo al nuevo punto de reunión. El parque no era bueno si tenía que entrenar con Cronos.
Era una gigantesca fábrica abandonada. Kraven entró usando llaves y nos invitó a pasar. Dentro había una señorita, una vampiresa de largo vestido color negro con un corset de satén y detalles purpura en encaje con dibujos de telaraña, cabello rojo sangre y ojos dorados sus delicados labios bebían sangre de una copa sentada en el brazo del enorme sillón donde Cronos me esperaba. Su piel era blanca pero sus rasgos tenían cierto aire afro.
—Es la hija de Cronos, Scarlett. —Explicó Kraven al notar mi curiosidad. Cosa rara a resaltar era la primera vez que veía tan actuar con cierta torpeza a Kraven.
—¡Bienvenidos! Latos, Orlok y… príncipe Drago.
—Muchas gracias señorita Scarlett que gusto verte en Rumania.
—Le agradezco mi adorada lady Ekimmu.
Scarlett se levantó de su lugar para a recibirnos de una manera increíblemente formal haciendo delicados ademanes con sus manos enguantadas. Saludo a Malice usando besos dobles. Kraven tomó sus pequeñas manos entre las suyas y las beso, sentí un escalofrió, era la mirada firme de Cronos traspasarme y ponerse fijamente en el vampiro calvo, una mirada de impaciencia mientras el beso parecía ser más largo que un simple saludo.
—Es un gusto conocerla Scarlett, pero… ¿Por qué me ha llamado príncipe? —Le respondí el protocolo y aproveche la oportunidad para quitarme la duda de ese momento.
—Es porque es tu derecho, Demian. —La profunda voz de Cronos quien se levantó de su asiento fue la respuesta. —Eres descendiente de Vlad III es natural que asumas nuestro liderazgo él era un príncipe y es por eso que ese será tu título.
—¿No hay democracia? ¿Cómo funciona la jerarquía?
Ante mi pregunta Scarlett se ruborizo, Malice escondió su cara de la vergüenza, Kraven quedó en blanco y Cronos mismo no pudo soportar su carcajada.
—La democracia es una forma de gobierno que no funciona para nosotros. En nuestra especie el más poderoso gobierna a los más débiles. Aun cuando el derecho sea de sangre, deberás estar bajo el mando de Camille hasta que tus habilidades la superen. No es necesario combatir para eso, solo con mostrar tus méritos bastará. Y aun así no es suficiente, la fuerza, el conocimiento y el carisma para liderar con verdad y justicia son el verdadero poder. Estoy seguro que por tu pasado humano debes creer que el poder es el dinero, ese poder es falso. —Explicó Kraven.
—Entiendo… aunque no deseo esa responsabilidad, si es mi deber, mínimo que sea cuando esté listo. Pero si quiero ser más fuerte, ayúdame Cronos a entrenarme.
—Un placer conocerte Demian espero volverte a ver… si sobrevives, papi es muy estricto. —Dijo Scarlett poniendo su mano en mi hombro a modo de pésame y se fue caminando hasta entrar en otra habitación.
—Me agrada el valor que has ganado pero el valor puede convertirse en insolencia con facilidad. Esta vez te dejare usar un arma, dime ¿Cuál es tu favorita? —El enorme vampiro se acercó a las grandes puertas de un armario, que al abrirlo mostró gran cantidad de armas medievales de diferentes partes del mundo.
—Siempre quise una espada japonesa como la del juego “Devil May Cry 3”. Así que elijo una katana.
Me acerqué admirado pero ya tendría tiempo de jugar con todas o al menos eso espero. Tener el arma en mis manos me dio una sensación de poder indescriptible.
—Bueno Cronos estoy listo para derrotarte.
—Cuanta arrogancia niño… te recuerdo que estás hablando con el comandante de la orden del dragón. Cargo que he mantenido por trescientos años. —Se paró delante de mí tomando su enorme martillo. —¡Atácame!
Acomodado en la enorme sala de máquinas de la convenientemente vaciada de estas dando lugar a una enorme habitación, desenvainé mi arma y ataque lo más rápido que pude con un osado corte horizontal de desenvaine, su arma bloqueo mi corte quedado milésimas de segundo sin defensa el tiempo suficiente para recibir una bofetada que me hizo morder el polvo.
Me costó levantarme, mientras mi oponente me observaba inmóvil, una vez de pie mis instintos tomaban el control lanzando un siseo de amenaza, volví a confiar en mi velocidad lanzando ataques engañosos para marearlo. Nunca llegaba a acercarme lo suficiente a él como para golpearlo pero si para ponerme al alcance de su enorme arma la cual fallaba cada ataque hacia mí. Una vez que bajó guardia le lancé mi katana para burlarlo y atacarlo con una patada, Otra vez estuvo por delante de mí. Simplemente se dejó apuñalar y con sus manos detuvo mi pie, tomó mi pierna arrojándome contra el suelo como un muñeco de trapo, sentí las fracturas pero estas sanaron al instante. No llegué a ponerme de pie cuando fui apuñalado por mi propia arma, quedando clavado en el suelo. Desesperado trataba de zafarme del empalamiento, cada movimiento me hacía destrozarme a mí mismo. El dolor me hacía rasguñar el suelo mientras gruñía como un animal herido.
—Es ingenuo de tu parte juzgarme por mi tamaño, mi fuerza compensa la falta de velocidad.
—Eres tan arrogante como yo Cronos, jamás juzgaría a un oponente por su apariencia. —Ponerme de pie fue increíblemente doloroso, toda la hoja, el fuchi y el mango atravesaron mi cuerpo. Haber quedado empalado retrasaba la regeneración de una herida que ya se hubiera sanado.
Cronos se arrojó sobre mí su enorme puño fue tan rápido que ni siquiera yo fui consiente de mis movimientos el instinto había tomado el control para salvarme. Esquivé el golpe apoyando mi mano sobre su brazo, girando sobre mí mismo en el aire. Quede por encima de su cabeza con su guardia neutralizada en esos instantes arranque una de sus orejas con mis garras. Quede detrás de él, sin darle tiempo a reaccionar. Logre atravesarlo con mi brazo luego al sacarlo salte pateando su espalda dos veces haciéndolo caer.
—Pude haber atravesado tu corazón si fueras mi enemigo. —Dije con seguridad.
—Que divertido, hacía mucho tiempo que alguien no me lastimaba de esta forma. —Comenzó a reír de forma muy bonachona al mismo tiempo una nueva oreja se formaba en su cabeza y el orificio de su pecho se cerraba de a poco. —La verdad no creí que llegaras siquiera a tocarme tan pronto, bien hecho tú ganas. —Celebró entre aplausos.
—¿Enserio? ¿Tan rápido? —Mis ojos se abrieron al escuchar sus palabras.
—No, no tan rápido… —Cronos chasqueo los dedos.
Filamentos invisibles me amarraron por doquier elevándome del suelo con la cabeza hacia abajo como si fuera a ser devorado por una araña. No tenía forma alguna de escapar. —Las batallas, no solo se basan en atacar de forma activa a veces puedes ganar sin siquiera mirar a tu oponente, ya bájalo Scarlett, Demian es más que apto para combatir contra un enemigo como yo.
—¿Scarlett hizo esto?
—Mi hija tiene un estilo sutil, prácticamente gana sin dejar de lado sus pasatiempos, su control de sus hilos es imbatible pero alguien con tu poder podría aprender a zafarse antes de ser convertido en rodajas.
—Es su forma decir que probaste tu poder ante el mejor de nuestros guerreros. —Kraven junto a Malice se acercó a nosotros.
—Haz pasado la prueba, la condesa Camille estará complacida. —Golpea de forma amigable mi hombro, casi dejándome en el suelo. —Sin embargo, no has descubierto todo tu potencial.
—¡Bien hecho! Estoy tan orgullosa. —Malice saltó sobre mí dándome un abrazo digno de una novia al apretar mi rostro contra su busto.
—Kraven por favor, llama a Scarlett dile que está listo y asegúrate de no perder el tiempo.
Kraven se dirigió al primer piso donde Scarlett estaba observando la batalla, algo extraño noté una mirada avergonzada en él nunca lo había visto ponerse así. «¿Acaso esos dos tienen algo?»
—Demian, dado que tu arma elegida es la katana podrás quedártela, aunque esta no tiene nada especial. Encargaré que te hagan una para ti con lo necesario para eliminar a tus enemigos. Aunque toma este consejo, prueba todas las armas que puedas a veces la afinidad por gustos no es la mejor elección para una batalla.
Cronos fue a cambiarse mientras yo me senté en un sofá que encontré junto a la pared. Malice se acurruco a mi lado como una mascota, necesitaba una muestra de afecto que tranquilizara mis instintos. Pese a sanar mis heridas me sentía cansado, cerré los ojos un momento y me deje llevar por la imaginación. Pensaba en mi vida humana, Nala es o era mi único amigo humano pero últimamente me evita. Los únicos amigos que tengo ahora son Kraven y Malice vampiros. Después esta ella, Maya. La chica que el solo verla es razón suficiente para sentirme feliz todo el día. Es tan linda, tan diferente de las chicas que veo ahora, es como si fuera la princesa de un cuento.
—Lo malo es que en los cuentos no hay monstruos y Demian tú y yo somos eso. —Interrumpió Malice.
—¿No te provoca Celos?
—No, es normal que los vampiros más fuertes tengan varias parejas, te prometo que me convertiré en tu consentida no me conformaré con ser una cortesana.
—Solo dices esto por orgullo, ya no te comportas como cuando nos conocimos, si actuaste celosa al principio.
—Quizás sea porque ya tuve parte de lo que quería conseguir, aunque la oferta para completarlo está en pie.
—Tal vez… pero no esperes nada.
—Te esperaré los siglos que sean necesarios… incluso para tener un simple beso.
—Eres romántica… pensé que eras solo pervertida.
—Si estuviéramos a solas sería mucho más atrevida.
Kraven llegó con Scarlett, en sus manos había una caja pequeña de joyería. La vampiresa tenía una sonrisa cómplice con un ligero rubor caminando lentamente detrás de Orlok. Cronos salió aseado y todos se acercaron a mí. Malice sonreía con satisfacción. Kraven entregó a Cronos la pequeña caja y él la abrió.
—Demian Drago, como comandante de los caballeros negros, te entrego la prueba de que no solo eres un vampiro sino también un guerrero. Te doy la bienvenida a la orden del dragón, descendiente de Drácula.
La situación me tenía perplejo, las palabras de Cronos eran serias y amables. Cada vez me siento menos humano, pero tengo miedo de terminar abandonando a mi familia. Aprendí a vivir y cazar como vampiro pero al volver a casa trato de ser el hijo y hermano que siempre fui. Me siento obligado a encubrir una verdad imposible para ellos. Ahora observo la medalla que Cronos sacó, un anfíptero tallado en metal con las alas abiertas, rodeado por un marco circular de metal trenzado.
Los conceptos que daba por normales cambiaron. La imagen del mal con la que crecí era incorrecta, no hay monstruos, no peores que los mismos humanos. Me mostraron que el verdadero mal se esconde detrás de cultos, rituales, grandes empresas y política. Aprendí que no hay vampiros más crueles que los seres humanos que lucran con las vidas de los suyos en los rincones más oscuros y profundos de la sociedad. Matar a esas personas para salvar a muchas es la diferencia, solo los violentos son los que merecen violencia.
Malice tomó la medalla y me la coloco suavemente sobre mi cuello cerrando las cadenas en mi nuca. No era de metales preciosos simplemente acero inoxidable normal lo que la hacía valiosa es su simbología.
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13 de abril: Me quedé perdido en mis pensamientos mientras manejaba, no estaba cazando, solo deseaba distraerme con la sensación de la velocidad, el vibrar del motor todas esas sensaciones al montar una motocicleta. Regresé a casa horas después casi sin reaccionar a lo que hoy sucedió. Entré a mi hogar mientras mi familia dormía, sigilosamente encendí la computadora.
Revisaba mi Email escuchando “Nightwish” mi banda favorita. Notó que llaman a mi puerta, raro a estas horas, antes de salir observo por la ventana luces azules y rojas, la policía, dudoso me dirijo a bajar y en el último llamado reconozco una voz: Margaret la madre de Nala con tono afligido. Preocupado salgo más aprisa al abrir la puerta la veo con sus ojos enrojecidos mirándome suplicante como si viera en mi a la última esperanza por alguna razón.
—Demian dime por favor ¿Acaso sabes algo de Nala? Hace días que desapareció y no ha vuelto a casa. Ya hemos hecho la denuncia a la policía pero no encuentran nada.
—No, pero si puedo asegurarle que se comportaba extraño, intenté hablar con él varias veces en el colegio pero simplemente me ignora, no sé qué le sucede estuvo faltando muchos días hasta una semana completa a clases.
—¡Imposible pero, yo lo vi irse al instituto todos los días! —La mujer quebró en llanto mientras uno de los policías trataba de consolarla, el otro siguió hablándome.
—Bueno lo único que hemos encontrado como pista es este papel estaba sobre la mesa del comedor el día que desapareció. —Me mostró un pedazo de papel desgarrado que decía: “Ya viene el infierno, Jamás van …”. —Hace semanas que estamos investigando muchas desapariciones de niños, pero esta es la primera que hay sobre un joven casi adulto, no queremos sacar conclusiones apresuradas porque el caso es distinto pero tal vez haya una relación. Es posible que solo haya huido de casa.
—Margaret es muy amable no veo razón para que el haga algo así incluso su familia tiene un buen pasar económico, aunque si esa nota suena como algo que el escribiría. Siempre estuvo interesado en el tema de la demonología. Si tuviera que investigar por algún lado empezaría por ahí. «¿Sera que Nala está con los acólitos?»
—Hace unas semanas un culto satanista en la parte abandonada de la ciudad tuvo un horrible asesinato en masa donde muchos fueron destrozados. Si tiene relación con ellos debemos apresurarnos. Gracias señor Drago por su ayuda, si sabe algo por favor no dude en llamarnos y disculpe por despertarlo a altas horas de la noche.
—No dude de eso oficial llamare y no se preocupe estaba jugando videojuegos en la computadora.
—Muchas gracias Demian. —La mujer aún afligida se apresuró a agradecerme con un abrazo antes de irse.
—De nada, apenas sepa algo llamare no se preocupe.
La patrulla se fue, me quede preocupado con lo que me dijeron, no creo que Nala sea tan estúpido como para subir el nivel de su fanatismo. Aunque me preocupan sus actitudes últimamente relacionadas a las drogas. Yo sabía que estaba fumando hierba e incluso intento hacerme probar. Eso estaba haciendo que nos distanciemos. Preocupado envié un mensaje al teléfono de Kraven tal vez podrían conseguir algo de información si es que los acólitos están relacionados. A las pocas horas Kraven junto a Malice llegaron a mi patio, para no hacer ruido mientras mi familia duerme salí al patio a hablar con ellos.
—Hemos buscado por cada parte de la ciudad pero no hemos encontrado rastros de ese humano. —Kraven me trajo los registros de las desapariciones, había una lista de sesenta y seis personas Nala el único que no coincidía con los demás siendo todos menores de tres años.
—Al parecer no somos los únicos interesados en este caso, un grupo de licántropos también parece haber investigado, sobre Nala: me cae mal, me trato de forma muy grosera cuando me conoció además creo que sospecha de nosotros, pero si es tu amigo te ayudare.
—Malice, ¿Por qué no me dijiste eso?
—No parecía importante hasta ahora, es normal que los humanos sospechen, es su instinto de supervivencia.
—Bueno en eso tienes razón.
—Algo me preocupa. ¿Chris es del clan de licántropos del cual hablamos pero no debería habernos atacado ya? —Interrumpió Kraven. —Tal vez sea posible que haya sido derrotado.
—La luna llena aún no está, y no apareció la vez anterior capaz espera que Demian sea más fuerte. —Inquirió Malice.
—Hace un tiempo tuve un sueño extraño, soñé con el combatiendo contra un acólito dominaba el fuego, pero se veía tan real como si hubiera presenciado la batalla.
—¿Un viaje astral? No lo veo como algo imposible debe ser algún poder que no dominas.
—Kraven, ¿Me harías un favor? —Le pedí y el asintió sin problema. —Vigilen los casos de desapariciones, tengo un mal presentimiento con ese acólito que vi en sueños.
—Chicos, si un humano domino la pyroquinesis con la ayuda de los demonios podría ser muy peligroso. —Malice se notaba inquieta, sea cual sea esta situación la asustaba.
—Desgraciadamente no solo se reduce a eso según mi sueño también podría regenerarse, y su poder está aumentando. Según sus palabras por cada persona que asesinó pueda volver a restaurar sus heridas.
—Tal vez entonces los niños desaparecidos, todas las desapariciones podrían ser sus víctimas. Me quedare contigo mientras Kraven investiga, si estás de acuerdo.
—Está bien quédate Malice, Demian apenas tenga algún dato serás el primero en saberlo. —El vampiro calvo se retiró saltando entre los tejados hasta desaparecer.
—Nos vemos. Malice estoy preocupado por otro tema. No es la primera vez que sueños con el acólito de fuego. Pero hay otro sueño que me preocupa.
—¿Dime, que es lo que pasa?.
—A los pocos días de que me transformaste soñé que me tenían encerrado en un laborator[…]
—¿Laboratorio? —Malice se puso pálida, la vi desfallecer por un momento no llego a tocar el suelo por sus reflejos pero vi ese momento de desmayo.
—¡Malice! —La tomé en mis brazos y subí por la ventana a mi habitación recostándola en mi cama.
Al acotarla terminó por perder el conocimiento. Me pregunto qué pasado tendrá para haber recibido ese shock con solo mencionar ese laboratorio. Puse sus manos entre las mías esperando que despertara. Mire sus ojos, lo que sea que este recordando era muy triste sus lágrimas caían, sus manos temblaban. Habrán pasado diez minutos, es la primera vez que la veo tan indefensa estaba por acostarme a su lado cuando de repente…
—¡Mamá! —Ella se levanta poniéndose en guardia, gruñendo, sus ojos brillaban en la oscuridad mirando a un punto vacío en la habitación. Me acerco más a ella, llamándola por su nombre eso causo que reaccionara, me miro suplicante, aterrada. Se acercó a mí para abrazarme y comenzó a sollozar descontroladamente.
—¿Malice que sucede? —Puse la voz lo más suave que pude para intentar tranquilizarla.
—Es que recordé algo de mi pasado, algo que tenía enterrado en mis recuerdos hace tiempo.
—¿Qué es? Confía en mi cuéntame que sucedió.
—Fui utilizada como experimento por los humanos.
—¿Experimento?
—Hay un grupo de científicos, se cree que son una facción de la inquisición que nunca cesó sus actividades, practicantes del Awtokismo. Mataron a mi padre y tomaron a mi madre cuando estaba embarazada. Querían crear una clase de vampiro que sirviera para cazar a los suyos y estuviera bajo el mando de los humanos. Los llamamos “los agentes” Capturan cualquier ser inhumano y experimentan con ellos. No tienen un país base y negocian con las fuerzas de todo el mundo. Yo estuve en sus laboratorios durante los primeros años de mi vida siendo la victima de sus cruentas pruebas. Hasta que fui rescatada por los caballeros negros bajo el mando de Camille.
—Nunca pensé que habían seres humanos así, pensé que solo los satanistas eran capaces de tanta crueldad.
—Los agentes, no creen en Dios ni en ángeles, ni en demonios para ellos somos animales y nos tratan como tales. Crearon una mutación en mi cuerpo experimentando con mi madre antes de que yo naciera y luego conmigo. Por eso mi cuerpo produce una cantidad de feromonas que dobla lo normal. Me diseñaron para ser un súcubo real.
—Quisiera matarlos con mis propias manos... no puedo perdonar lo que te hicieron.
—Eres tan lindo, hemos atacado las bases que encontramos pero cada vez que lo hacemos, muchos caen. Saben que nos mata y lo convierten en arma desde granadas de ajo a reflectores de luz ultravioleta, no sabemos que están planean solo sabemos que se llama proyecto Lilith.
—¿Lilith? Me suena conocido lo mencionan seguido.
—Lilith fue la primera mujer en la mitología judeocristiana, Adán fue su esposo y ella la primera mujer real. Ella según las creencias discutió con su esposo porque él quería dominarla y termino abandonándolo al descubrir que la reemplazo con Eva otra humana original de carácter más sumiso. Decidió arrojarse al mar rojo y acabar con su vida. Así que fue condenada al infierno y su alma se convirtió en demonio. Debido a su belleza los demonios la ultrajaban para corromper su alma. Resistió siglos y escapó del infierno con parte de su humanidad intacta. Buscó redención pero su corazón la obligaba a querer alimentarse de las almas de los hijos de Adán. Con el tiempo el relato fue cambiando las almas por sangre y Lilith convertida de demonio al vampiro original. Creemos que ella es nuestra génesis, la que creó todos los clanes de vampiros.
—Un vampiro original… Es lo que buscan, un súper vampiro para usarlo como arma, un ser sin debilidades y más fuerte dedicado a matar a otros vampiros.
—Es una idea aterradora, incluso teníamos miedo de que cumplieras tus amenazas, no me imagino como alguien podría intentar crear a algo peor.
—Desgraciadamente es lo que sospecho en base a lo que me dijiste, cambiando de tema ¿Te sientes mejor?.
—Sí, muchas gracias Demian eres un buen chico cuando quieres. Sabes, me encantaría quedarme pero es mejor que me valla.
—Puedes quedarte… de hecho después de lo que dijiste, no hay forma en que no quisiera acompañarte.
—Me encantaría hacerlo, aunque no quiero que mi presencia te afecte, estas expuesto a mis feromonas y huelo tu excitación cuando ni siquiera tú eres capaz de notarlo.
—Insisto no quiero que estés sola esta noche, no digas cosas así tampoco tengo ánimos de intentar nada.
—No lo digas así… Tu corazón al parecer ya está domado, no deseo intervenir con tus sentimientos y menos aprovechándome de la voluntad de un hombre.
—Está bien te veré mañana en el instituto.
—¿No hay problema verdad? ¿Con que me valla?
—No para nada, hasta mañana.
—Hasta mañana. Te quiero. —La vampiresa me dio un suave beso en la mejilla y se retiró saltando entre las azoteas. Yo me acosté y me puse a meditar con la almohada toda esta situación.
La luna llena pronto vendría y con ello volvería a encontrarme a Chris. Cronos ha insistido en que no estoy listo Chrisaor ha sido un hombre lobo toda su vida. Bendecido con su linaje desde su adolescencia ha viajado por toda Europa acabando con cualquier rival en su camino. Su relato es aterrador, pero estoy seguro de tener oportunidad. Intentaba descansar mis ojos mientras meditaba, con mi nuevo reloj biológico me era difícil conciliar el sueño, efecto que quería revertir para no empeorar mi nivel académico.
La soledad se apodero de mí, lo que hizo que tomara una segunda almohada y me abrazara a ella como si fuera el cuerpo de alguien más, de una compañera con quien compartir todos mis secretos. Necesitaba a Maya en ese momento me admití a mí mismo mis sentimientos. Me había enamorado de ella, tal cual como lo había notado Malice antes de irse, aparte de mi familia ella es mi único respiro de este mundo de oscuridad al que pertenezco. Si yo soy oscuridad y muerte ella es la luz y la vida es a mis ojos la flor más pura de la humanidad. Me siento complementado con solo pensar que vive en el mismo mundo que yo. La deseo a mi lado más no por el calor de su piel. Usaría solo las muestras de amor físicas como forma de expresar lo que cualquier palabra que diga no llegara a alcanzar. Si tan solo supiera todo lo que estos fugaces encuentros provocaron en mí. Quizás es mejor así, porque a diferencia de mi familia me sería imposible ocultarle mi verdadero yo. Soy un monstruo para ella, un depredador que podría matarla. Es sano desde su humanidad que me tenga miedo.
Intentaré alejarme quizás así estos sentimientos desaparezcan, no puedo permitir que sufra cualquier daño por mi culpa. Recuerdo haber abrazado aún más fuerte esa almohada mientras pensaba en su nombre, en sus ojos cafés y cabello oscuro, en su menudo torso con una cintura tan delgada que uno solo de mis brazos podría sujetarla. Como es posible que alguien pueda hacerme suspirar de esta manera…
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