¿Quién es capaz de concentrarse en el trabajo, si lo único que quieres es que sean las 8 de la noche?
Las horas pasan muy lento cuando tienes tanto ansiedad. Fue el lunes más largo de mi vida, apenas estaba comenzando y la idea de irme a ver sola con ella me llenaba de nervios. No pude hacer nada bien ese día, más que pensar en la hora de salida y en cómo me iba a vestir.
Al fin las 5:30 de la tarde, salí como alma que lleva el diablo. A las 6:15 ya estaba en mi casa dándome una ducha y depilándome de arriba a abajo. Me maquille muy suave, me miré como 100 veces en el espejo hasta que estuve contenta con la ropa que llevaba puesta, contando con la complicidad de mi esposo que por WhatsApp me daba su opinión.
Media hora antes de lo esperado ya estaba lista y los nervios me comían viva.
***
A las 8:00 de lo noche en punto, super puntual, llaman a anunciar que había llegado. La ví desde lejos y wow, en ropa de oficina la diferencia iba hasta el cielo. Era un postre caminante por donde quisieras mirarla.
Cuando llegué ella estaba afuera del carro hablando por celular. Me dio un beso en la mejilla y tapando la bocina me dijo:
- ¿Y Thomas?
Le hice señas con la cabeza de que no iba. Tapó de nuevo la bocina y me dijo:
- Maneja tu porfa, mientras yo termino esta llamada
Le hice señas de que no importaba yo la esperaba y lo único que hizo fue montarse en la silla del pasajero y hacerme señas para que me subiera.
- No he manejado nunca un carro tan grande
Volvió a tapar la bocina:
- Dale fresca que esta camioneta es automática y de una le coges el tiro, vamos para El Tesoro ¿listo?
No tenía intensiones de manejar, así que no llevaba los zapatos adecuados. Me quité los tacones y ella con una sonrisa de complicidad me los recibió para colocarlos a su lado.
Todo el trayecto estuvo pegada de ese celular tratando de resolver un problema de trabajo. Apenada, me hacia señas de vez en cuando, diciéndome que pronto terminaba y estaba con migo.
Entramos al centro comercial y nada que terminaba, así que me hice de lado, me recosté contra la puerta y aproveche que estaba distraída para verla de arriba a abajo. Me embelese con sus piernas descubiertas y la abertura lateral de su falda que dejaban ver hasta sus muslos.
***
Al fin colgó después de 5 minutos y me dio un abrazo como para romperme los huesos
- No te imaginas, las ganas que tenía de verte
Me dio otro beso en la mejilla, aunque yo lo esperaba en otro lado.
- ¿Vamos? -entregándome los tacones y bajándose del carro-
Dio la vuelta, abrió la puerta del conductor y me ayudó a bajar.
- Estás como una princesa, que hermosa!
Haciéndome sonrojar y mi corazón pum pum pum a punto de estallar. Me sentía como una adolescente.
- Yo tengo un hambre terrible, me imagino que vos también
Empezó a contarme lo duro que había estado su día y hasta pensó en cancelar la salida, pero más bien buscó la forma así fuera por teléfono de resolver el tema antes de perder está oportunidad.
Llegamos al restaurante Milagros, donde ya había pedido reservación. Nos acomodaron en una mesa, una frente a la otra y sin siquiera ordenar nada ya nos estaban llevando las entradas y algunas bebidas. Ya lo tenía todo planeado.
Estuvimos un buen rato hablando de los trabajos y de la comida tan deliciosa, le agradecí varias veces por su atención. Una vez terminamos de comer me dieron ganas de ir al baño y pidiéndole permiso me levante de la mesa.
- ¿Vas al baño?543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡXSZdE2LoOo
- Si543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡd9IhLJRWO9
- Espérame yo también
Llamó al mesero y le pidió que nos fuera trayendo el postre mientras regresábamos. Salimos a los baños del centro comercial y cada una entramos a un cubículo.
No sé si soy la única persona en el mundo, pero para mí escuchar a otra mujer orinar me excita mucho. Pudiendo imaginar que era ella y lo hermosa que estaba hizo que se me subiera la temperatura.
Salimos y en el lavamanos ella me alcanzó, se me quedó mirando por el espejo, con esa carita de nervios y sonriendo de vez en cuando.
- ¿Tienes mucho calor?543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡm6yPCzfoyk
- Si, no sé si es la comida o las bebidas que me tienen así -tratando de disimular-
Me colocó sus manos mojadas en el cuello y desde atrás me soplaba ráfagas suaves de viento. Cerré los ojos y todo mi cuerpo se erizo.
Se escuchaban una personas hablando entrar al baño y ella se separó de mí a toda marcha por una toallas de papel y disimular.
Cuando regresamos al restaurante, había dos postres de chocolate espectaculares y una nota en mi puesto. Ella un poco nerviosa, tomó su plato y lo ubicó junto al mío, se cambió de silla para quedar a mi lado.
Tomé la nota y antes de leerla le di una mirada a los ojos. Su rostro rígido y asustadizo, se llevaba las manos a la boca y se mordía las uñas.
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Es un verdadero milagro haberte conocido. ¡Gracias!543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡK1t7TbwGnP
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- Yo también estoy muy agradecida con la vida por ello -le dije al oído con un abrazo-
Empezamos a comer el postre y ella me miraba queriendo decirme algo pero no se atrevía, cada que lo intentaba se metía un nuevo bocado para disimular, no me aguanté.
- ¿Te pasa algo?
De nuevo lo dudó por unos minutos, hasta que su cuerpo rígido por el estrés me dijo:
- La verdad, no se que hacer con vos
No pude mas que asustarme por su cara de angustia, la tomé de la mano.
- Relajate, no pasa nada. Podemos hablar como amigas ¿te acordas en la piscina? Así igualito estoy hoy para ti
Disimuladamente quito mi mano sobre la de ella y me dejo saber que la estaba incomodando acercándome tanto. Así que me incorpore de nuevo y deje un espacio prudente con el que pudiéramos conversar pero no se tornara "raro" para los demás.
Ella se relajó y finalmente me contó lo que la mortificaba:
- Mira, al otro día salí despavorida de la finca por lo que había pasado. No quería verte a los ojos y pensar en todo lo que hicimos -sonrojandose y agachando la mirada- . Nunca, nunca, nunca en la vida me había metido con una mujer, ni siquiera se me había pasado por la cabeza hacerlo -tomando un trago largo de su bebida-. Cuando llegué a la casa todo me daba vueltas y traté de excusar mi comportamiento en todo lo que tomamos y luego en lo que fumamos.
Volvió a tomar un trago más grande hasta que terminó su copa y al mesero que pasaba a su lado le pidió otro dos con señas.
- Me prometí que no iba a volver a pasar, ayer que me mandaste el relato estaba en sano juicio, pero igual permití que pasaran cosas que no debía hacer
Cuando la iba a interrumpir, llegó el mesero con las dos copas. Me entregó una y brindando se tomó casi la mitad de la de ella. Yo iba a responderle y de inmediato me detuvo
- Déjame terminar -con ojos de suplica-. En el trabajo que estoy no me puedo dar el lujo de que alguien se entere de que esto paso. Pero si hay algo que tengo claro, es que no te quiero perder por nada del mundo, por favor. Me parece demasiado valioso encontrar una amiga como vos; con tu sinceridad, sencillez y soltura para hablar; como para no poder superar lo que pasó y podamos seguir siendo amigas.
Tomó de nuevo la copa y desapareció el resto de licor que quedaba en ella. Se quedó mirándome asustadísima dando un fuerte suspiro.
A mí se me estaba partiendo el corazón a pedacitos, pues estaba demasiado ilusionada con poder seguir disfrutándola.
- Pilar vos me encantas, eso no lo puedo negar ni ocultar. Me encanta lo decidida y el aire de seguridad que emanas. No tengo como negarte que me encantas y me atraes físicamente por montones -haciedo de tripas corazón mientras me dejaba en la Friend Zone, tomé un poco de la copa continué- Yo tampoco te quiero perder como amiga.
Mientras me moría por besarla ahí delante de todos, no más pude darle un abrazo.
No se puede negar que las cosas después de eso se tornaron extrañas y la conversación no fluía igual, se sentía un poco de tensión en el ambiente, pero todo fue retomando su curso normal mientras nos terminábamos el postre de chocolate y para ella unas cuantas copas mas.
Pidió la cuenta y cuando se fue a parar, se dio cuenta de que ella había bebido de mas.
- Creo que no voy a poder manejar así. ¿Será que me puedes llevar a mi casa y de allí esperas a tu esposo para que te recoja?543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡOUa98dJCbX
- Claro -asentí con la cabeza-
El centro comercial para esa hora estaba muy solo, se nos habían pasado las horas. Bajamos por los corredores muertas de risa y cuando ella trastabillaba yo la tomaba de la cintura. Se me quedaba mirando con los ojos iluminados, luego caía en cuenta de lo que estaba haciendo y volteaba a mirar para todos lados separándose de mí, como tratando de dejar claro de que no éramos nada.
La ayudé a subir al carro y colocarse el cinturón, aprovechando para rozar uno de sus senos y acercarme a su cara para abrocharlo, pero la volteó para que no quedáramos de frente. Entendí el mensaje.
Me monté y encendí el carro.
- ¿Dónde es tu casa?543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡuIuy45ggHS
- Yo te voy guiando
***
Quedaba relativamente cerca. Luego de varias indicaciones llegamos. Pasamos una portería y dimos vuelta a la derecha en una glorieta pequeña. Me señaló la entrada y presionó el control remoto para abrir la puerta del garaje mientras se encendían las luces en el interior.
Entré el carro y lo apagué. Ella presionó el botón del control, mientras se cerraba la puerta ella buscó mis tacones que estaban a su lado. Yo los recibí, pero ella no los quería soltar, se quedó mirándome a los ojos y se mordió el labio.
- ¡Amigas! ¡solo Amigas! -se regaño en voz alta-
Se bajó del carro sin esperarme y con sus movimientos torpes por el licor casi se cae. Ni siquiera me coloque los tacones, los dejé tirados en la silla y día la vuelta rápido para ir a ayudarla. Estaba más alcoholizada de lo que parecía.
Pasé su mano por encima de mi cuello y la abrace por la cintura. Le ayudé a subir un par de escalones y la ayude a sentarse en uno de los muebles de la sala.
- ¿Tienes agua?543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡxoZg0nlwsu
- Si, en la nevera -me señaló la dirección de la cocina-
Tomé un par de botellas frías que había en la puerta y me senté a su lado. Destapé una de ella y le ofrecí a tomar.
- Estamos en confianza ¿cierto?
Como estaba tomando de la botella, no me podía responder, pero con sus manos hizo un ademán que decía "adelante".
Le quité los tacones, llevé sus pies a mis muslos. Me deje caer cómodamente en el sofá y mientras llamaba a mi esposo masajeaba la planta de sus pies sin voltear a mirarla.
- Hola amor, ¿todavía te demoras mucho? ¿será que me puedes recoger en la casa de Pilar?
Me colgó rápido porque estaba ocupado y luego de mandarle la ubicación por WhatsApp le respondí.
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- No te demores, no sé cuánto pueda aguantar543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡaUBIw4SXyW
- Me demoro 😈 jajajaja543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡJD02NndEe2
- ¡No! en serio. Ven rápido, me quiero ir543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡc6V5gf5qB3
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Solté el celular en la mesa de centro y ella estaba ahí tendida de placer, con los ojos cerrados, mordiéndose los labios y su placentero mmmmmmmmm. Yo ni siquiera lo estaba haciendo con la intensión de excitarla, pare al verla así y con mirada inquisidora me pidió continuar.
- No no, Pilar venga hablemos mejor, yo no soy de palo, te veo asi y me dan ganas de hacerte de todo
Ella se incorporó, tratando de recobrar la compostura. Dio un trago a la botella.
- Si si, es verdad, ven mas bien te muestro la casa mientras vienen por ti
***
Cambió de nuevo su actitud por una mas seria y me mostraba su casa como una mamá atendiendo la visita, espacio por espacio, contándome historias de los viajes donde había conseguido algunas decoraciones.
Uno tiene un límite. Ella subió las escalas al segundo piso, yo iba detrás deleitándome con su rico trasero y sus largas piernas. Llegamos a un descanso y antes de que pudiera prender la luz, la tiré contra una pared y le robe un beso.
- ¡Ay no! si ve, usted no ayuda Erika
Pasando sus manos sobre mi cuello y entregando su boca para recorrerla con mi lengua. Baje mis manos lentamente por su espalda y cuando le agarré las nalgas me empujó para separarnos.
- Porfa, porfa, no me hagas esto, no podemos seguir así
No lo puedo negar, me molesté. Empecé a bajar las escaleras y ella se quedó arriba. Me senté en el sofá y cogí el móvil.
- Creo que mejor voy a pedir un taxi
Ella bajó rápido las escalas, apagó las luces de la sala, me quitó el móvil de las manos y lo tiró a otro sofá.
Se me sentó encima a horcajadas. Colocando sus manos en mis hombros.
- No, no, eso no lo voy a permitir -su cara marcada por la angustia-. Entiéndeme un poco, mi cabeza me dice una cosa y mi cuerpo otra
Estaba inmóvil petrificada, con ajos de cervatillo asustadizo. Me tomó la cara entre sus manos-.
- Al diablo los demás. No puedo aguantar
Apretó sus labios contra las míos, fue un beso poderoso, con ganas, de esos que te roban el aliento.
- Prométeme, júralo por lo más bendito en tu vida que no le vas a contar a nadie sobre esto
Moví la cabeza negándome y ella se tiro hacia atrás con los ojos abiertos por completo.
- No te puedo cumplir esa promesa, ya varias personas lo leyeron543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡ1e1N1gcv3m
- ¡Casi me matas de susto! -dio un respiro de alivio-. ¡Pendeja! escribe lo que quieras, pero no le cuentes a nadie quien soy. ¡Prometelo!543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡrX4zicdSBr
- Lo prometo543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡFQGggTlxoz
- Además me gusta leer lo que escribes, disfruto demasiado leerlo543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡLdHZpbxzh1
- ¿A sí? -le di un beso-543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡkHpZ5vqaPH
- Si, fue cómo volver a vivir lo más excitante que hice en mi vida
Volvió a besarme, metiendo su lengua y pasándola por el contorno de mis labios.
- ¡Prometelo!543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡA97Qxb46Mn
- Yo lo hice543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡaKoYoRMqz0
- Hazlo de nuevo -me tomó del rostro con ambas manos- me estoy arriesgando demasiado por ti ¿Lo entiendes?
La tiré de espaldas al sofá para poder quedar encima y mientras desabrochaba su camisa le decía al oído.
- Lo prometo. Seremos toda una tumba. Te lo prometo
Me apoderé de su cuerpo besándolo poco a poco. Su oído, su lóbulo, seguido por su clavícula a la que dí varios mordiscos pequeños, pase por entre sus senos sin quitar el sostén, bese sus costillas y luego su vientre agitado por la respiración, metí mi lengua en su ombligo y saco su primer gemido.
Desabroché su falda, con su complicidad levantó la pelvis y salió sin mucho esfuerzo. Ahí estaba toda para mi tendida en el sofá. Me quedé unos segundos contemplándola desde lejos. Esos pequeños instantes son los que quedan grabados de por vida en tu mente.
- Mamacita, eres demasiado hermosa
No me quería más tiempo lejos, se sentó en el sofá. Me acerqué de pie y ella me abrazo besando el vientre mientras bajaba mi falda. Apenas se deshizo de ella se colocó de pie y me sacó la camisa por encima sin siquiera detenerse a quitar los botones.
Volteó a mirar a todos lados, las ventanas estaban sin cortina.
- Vamos a mi habitación, acá nos pueden ver los vecinos.
Me tomó de la mano y apresuradamente la seguí por las escalas disfrutando del tiquiti-tacate de sus glúteos al subir el pie en cada escala. Alcanzó el último peldaño y plasf se llevó su palmada por estar tan buena.
Solo volteó a sonreír con complicidad, no paró hasta tenerme en su alcoba y tirarme de espaldas en su cama llena de cojines.
Ella continuaba de pie, alcanzó mis caderas y saco mis tangas magistralmente, luego me señaló el brasier y me ordenó quitarlo. No tuvo precaución en ser sensual, se quitó el de ella y los cacheteros con encaje llenando mis ojos con su cuerpo tonificado.
Levantó mi pie derecho y empezó a besarlo, sus manos jugaban con mi tobillo y pantorrilla, mientras mi respiración subía al ritmo de mi excitación. Caminaba lentamente a besos, alcanzó la parte trasera de la rodilla, descubrió uno de mis puntos débiles cuando solté un leve gemido y mi entrepierna se mojó. Entre lametones, besos y pequeños mordiscos recorría mis muslos. Se detuvo un instante y me lanzó una mirada... se fue directo a mi sexo y cuando ya esperaba su lengua, solo sentí el calor de su respiración para tomar mi otro muslo. Me estaba matando.
Finalmente sentí la calidez de su boca y lametazos en mi vagina, pero no sucedía nada más, toda la excitación que tenía de repente término. Ella la notó.
- Lo siento, no soy capaz, aún no me acostumbro a la idea
La atraje hacia mí, la besé con pasión corriéndole el cabello y tirándola boca arriba en la cama.
- No te preocupes, no te obligues a hacerlo si no lo sientes
Bajé recorriendo su cuerpo con mi dedos hasta su vagina, me mordía los labios sintiendo su piel tan delicada,
- ¿Quieres que yo lo haga?543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡrzAp75gvmH
- Si, por favor... sueño con eso desde ese día
Mi boca se hizo agua, hoy iba a ser solo para mí. Mis dedos comenzaron a juguetear con sus labios mientras que una saliva abundante caía desde mi boca hasta alcanzar su cuerpo. Su respiración se agitaba y su ojos me pedían que no la tortura mas.
La tomé de los pies y la corrí hacia un lado de la cama, luego tomé uno de lo cojines que acomodé entre su espalda y los glúteos, levante sus pies hasta el colchón y yo me arrodille en el piso. La vista no podía ser mejor.
Rodeé con mis brazos sus piernas y me hundí en su entrepierna, me detuve para deleitarme con con su olor, inundando todos los sentidos.
La torturé por unos minutos besando y mordiendo sus muslos, el espacio entre sus labios y sus piernas la hacía brincar y gemir cada que sentía pasar mi lengua. Sus jugos empezaron a florecer y mi lengua como si se tratara de un imán fue atraída hasta su sexo.
Era un manjar, tanto su olor como su sabor y cuando comenzó a gemir mi sexo se empapó. Una de las manos la ubique en su vientre para hacerle presión y la otra la usaba para masajear su clítoris, mi lengua recorría todos sus labios externos e internos y la penetraba de vez en cuando con la punta de la lengua.
Sus manos apretaban con fuerza el tendido y los gemidos eran cada vez más frecuentes y sonoros. Empezó a mover su pelvis de arriba a abajo, hasta que un gemido más fuerte acompañado de un temblor de sus piernas, me dio el anuncio para no perderme ni una gota de su orgasmo. No paraba de venirse y yo de hacerle sexo oral, me estaba quedando sin respiración, pero no podía detenerme. Ella estaba mojándome la nariz, los pómulos y hasta de la barbilla sentía gotas bajando por mi garganta.
- No más porfa, ¡no mas!
Empujando me de la frente con los pocos alientos que le quedaban.
- No me puedo venir más
La acomodé de nuevo con los pies en la cama y me acosté a su lado, acariciándola con ternura por todo el cuerpo. Besándonos, ella me miraba con una sonrisa de oreja a oreja y sus pómulos color carmín.
- Eres mil veces mejor, de lo que me imaginaba mientras me tocaba pensando en vos. Esa lenguita es bien peligrosa
Se inclinó encima de mi, besándome el cuello y chupando min pezones endurecidos.
***
Nos quedamos tendidas de lado, mirándonos de frente. Acariciándonos con la yema de los dedos, sin decirnos nada. Nuestras miradas lo decían todo.
Escuchamos el sonido del citofono y el de mi móvil a la vez. Estábamos tan perdidas en nuestro mundo que lo habíamos olvidado por completo.
- ¡HP llegó Thomas!
Agarré mi ropa y bajé corriendo las escalas a contestar.
- ¿Amor, no me dijiste que te recogiera rápido? -con tono refunfuñon-543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡh09Dj9EKMg
- Si es que...543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡHq5uYzUM6a
- Vamos rápido que tengo que seguir trabajando543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡpA0HaNuKjo
- Si... si, ya voy
Pilar, ya había contestado el citofono para autorizar su ingreso con el portero.
- Lo siento, me tengo que ir ya543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡMuNHyxo3zj
- ¿Por qué no le dices que pase un momento? -con cara de puchero-
Miré la hora, 1:30 de la mañana.
- Demonios, con razón esta tan enojado, ahora si me va a matar
Me vestí a toda carrera. Ella se colocó una bata de dormir y me acompaño a la sala sin dejar su cara de mimos al lado.
- ¿Y si se quedan a dormir?543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡzPuUPzQVKW
- Hoy no podemos -acaricié su mejilla con ternura- pero te prometo que nos vemos pronto ¿listo?
Me acompaño a la puerta y desde allí saludo a mi esposo con una mano. Demasiado delatadas como para evitar la cara de mi esposo de "Aja picaronas". Ya estaba a medio camino de salida.
- Danos un segundo, se me olvidó entregarle algo -tomándome de la mano y me llevó adentro-
Ajustó la puerta y contra la pared me soltó un beso que me dejo sin aliento.
- Separen el viernes, no acepto excusas
Me dio una palmada en el trasero y me mando a la calle.
Me monté al carro y le estampe un beso mientras le agarraba el miembro que de inmediato comenzó a endurecerse.
- Que rico hueles y sabes, se nota que te divertiste
Enrolle los ojos hacia atrás, me deje caer en la silla y mientras abrochaba el cinturón, con una sonrisa le dije
- Ni te imaginas
Tomando su mano y metiéndola en mi entrepierna mojada. No dudo en meter sus dedos, sacándome un gemido y luego saborearlos en su boca.
Volteamos a mirarla y nos despedimos los tres en la distancia. Esperó a que arrancaramos y cerró la puerta.
Mientras esperábamos que se abriera la reja de la salida, le dije:
- No sé como vas a hacer, pero el viernes nos invito a salir. Sea los que sea que tengas programado mira como cancelarlo. Porque los quiero a los dos para mi
Mi esposo levantó la mano para darle las gracias al portero y apenas tomamos la via principal contestó:
- ¡Aye captain, my captain!
***
A eso de las 6 de la mañana recibo un mensaje al WhatsApp con una foto.
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¿Cenicienta eres tú?543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡkuqBUeUqY6
¿Me va tocar buscar la dueña de estos tacones?543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡKuwhtefISh
Si los quieres de vuelta te va tocar venir a re-cogerlos 😏🤭543Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡPB44b2bezN
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