Bruno se encuentra a mi lado, su mano está apoyada en mi hombro, observo como los soldados traen el cuerpo de mi madre, todo el mundo llora, lamenta la pérdida de su reina, los soldados se paran, mi padre se acerca hacia el cuerpo de su esposa, le da un beso en los labios, le dice algo, me acerco al cuerpo, le digo:
-Gracias por todo lo que has hecho por mí, te quiero, vengare tu muerte, aunque sea lo último que haga.
Le doy un beso en la mejilla, vuelvo a mi sitio, los soldados la entierran, al cabo de unos minutos todo ha terminado, la gente se retira, entro en castillo, me dirijo a la habitación, llego, al entrar me pongo mi ropa de guerrera, cojo mis armas, voy a salir, pero de pronto la puerta se abre, entra mi padre, me mira:
- ¿Dónde vas?
-Voy a matar a Lucrecia
-No lo vas a hacer, deja ahora mismo tus armas
- ¿Crees que voy a dejar que viva? ¿Después de lo que ha hecho? ¡NO!
-No es el momento para luchar, acabaras con ella, pero no hoy, hazme caso
Empiezo a llorar, suelto mis armas, le miro:
-No es justo, ha matado a su propia hermana y Elizabeth se ha unido a ella.
Él se acerca:
-Sé que quieres acabar con ella, pero si vas te matara, no puedo perderte, eres lo único que tengo.
Me quita las lágrimas:
-Te quiero Danerys, te necesito a mi lado, si te pasara algo ya no tendría motivos para seguir viviendo, quédate a mi lado.
-Siempre estaré contigo
Me abraza, le correspondo el abrazo, al cabo de unos minutos nos separamos, me mira:
-Estaré en mi habitación, hasta luego
-Adiós
Se va, me quito la ropa de guerrera, guardo mis armas, es de noche, miro por la ventana, de repente llaman, miro hacia la puerta:
-Adelante
La puerta se abre, entra Bruno, me mira:
-Hola
-Hola
Cierra la puerta, se acerca:
- ¿Cómo estás?
-Mal, con ganas de ir a matar a esa maldita víbora
-Lo siento, pero me tienes aquí
-Gracias
-Quería hablar contigo
-Dime
-Quiero que me enseñes a luchar
Iba a hablar, pero me interrumpe:
-No tienes que luchar sola, te ayudare a acabar con ella y con todos lo que intenten hacerte daño, te lo pido porque eres la mejor guerrera, por favor, estoy cansando de huir o que me salven, quiero sentirme útil.
-De acuerdo, te enseñare a luchar, pero no será fácil
-Daré lo mejor de mi
-Mañana a primera hora empezaremos
-Bien, me retiro
-Vale
Iba a irse, pero se para, de repente se acerca a mí, me abraza, me quedo sorprendida, le correspondo, al cabo de unos minutos se separamos, él me mira:
-Hasta mañana
-Adiós
Se marcha, me tumbo en mi cama, al cabo de unos instantes me quedo dormida
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