Se levantó caminando en círculos, apretando los puños sin mirarme, todavía le quedaba mucha rabia por descargar y si eso significaba que me follara como lo acababa de hacer iba alentarlo a que se desquitara conmigo.
- ¿Eso fue todo?
Volteo a mirarme histérico, empuño su mano y me sentí un poco en peligro. Se desquito golpeando con sus dos manos empuñadas la barra americana de la cocina.
- Sáquese todo eso. Cómame, fólleme, culeeme, hágame lo que quiera, hágame algo que siempre quiso en esta casa y no haya hecho
Se dio la vuelta y me miró con la maldad de un demonio. Me tiró uno de los pasamontañas con rabia.
- ¡Póngaselo!
Mientras él se colocaba el otro. Fue a su estudio y cogió una extensión de energía más larga, desconectó las luces y la enchufó a la toma de energía. Abrió el balcón y me ofreció su mano para ayudarme a levantar.
- ¿Lo que sea?60Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡXFvzx5h5X9
- ¡Lo que sea!
Me llevó hasta el borde del balcón, una baranda de aluminio que sostenía por debajo un vidrio templado. Me dio la vuelta, respiró en el oído y me pasó la lengua por el cuello. Mi vientre sintió el frío de la baranda, me cogió del pelo y me hizo inclinar hacia adelante, primero pensé que era un juego hasta que sentí el vacío, como si fuera a caer, pero con el peso de su cuerpo las piernas no me dejaron avanzar.
- ¡AAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHH!
Grité del susto, por un segundo pensé que eso era lo que siempre había querido y nunca había hecho: tirar a alguien desde su balcón y ver cómo se estrellaba contra la acera. El maldito solo me quería mostrar que tan alto estábamos. Definitivamente no aprendo, yo y mi maldita bocota.
- ¿Asustada?60Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡLUGPfFUegn
- Idiota casi se me sale el corazón --le cogí la mano para que lo sintiera--
Ni se disculpó ni nada, simplemente me dio un beso fraternal en la cabeza, Se arrodilló para conectar las luces a la extensión y empecé a brillar de nuevo. Entró por una de las cámaras, para tomarle fotos a su hermosa y colorida versión de su árbol de navidad que estaba orgulloso de exhibir.
En el edificio del frente que era unos pisos más bajo que el suyo, unos jóvenes tenían una celebración con todas las de la ley. Electrónica a todo volumen, licor y drogas. Nos gritaban desde el balcón, hombres y mujeres se atiborraban peligrosamente en el balcón, se atestaban en las ventanas para poder ver a los locos exhibicionistas y filmarlos con sus teléfonos.
- Yo no tengo ninguna reputación que cuidar --me arranqué el pasamontañas y empecé darle vueltas sobre mi cabeza--
En el apartamento todos gritaron como locos cuando los hice y mi risa de placer la capturó en varias fotos. Me cogí los senos por debajo y los moví para enloquecerlos y señalé a una de las nenas para que hiciera lo mismo. No solo una aceptó el reto, sino varias de ellas todas borrachas se levantaron la camisa para enseñarlos, les aparecieron manos desde atrás como pulpos y las empezaron a desvestir.
Llamé a Mariano que se puso a mi lado para que les tomara fotos y me arrodille a mamar mientras él ajustaba sus lentes para poder hacer zoom y enfocarlos. Era como ser una líder de electro-perras, dispuestas a seguir nuestra locura desde allá. Las nenas se dieron la vuelta y se arrodillaron a seguirme el juego desvistiendo al primero que encontraron detrás y meter su miembro en la boca. Ya no solo nos filmaban a nosotros sino también a ellos.
La pólvora y fiestas alrededor ahogaba los gemidos que cruzaban entre edificios, pero el alboroto que causamos era imposible no escucharlo. Cada vez llamaba más la atención de otros vecinos, algunos que se asomaban por la ventana, se quejaban moviendo la cabeza y se volvían a entrar, otros más solapados disimulaban detrás de las cortinas con las luces apagadas disfrutando el show.
Me levanté dándole la espalda, monté una pierna sobre la baranda y volteé a mirarlo.
- ¡Fóllame Santa!60Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡommvsVUUJm
- Estas loca60Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡHVwLXLF7Pg
- Muy loca
Me dio un beso riéndose. Se acomodó detrás, agarró su miembro y me lo clavó con cuidado de abrazarme por la cintura para no correr más peligro del que ya estaba corriendo. Le movía las nalgas en círculos, me pellizcaba los senos y gemía mirando el descontrol que creamos al frente. Una orgía increíble.
Me encantaba que me estuviera exhibiendo, follándome en un balcón donde me pudieran ver y filmar. Me imaginaba cuantas pajas se iba a hacer después pensando en nosotros y las ganancias cuando se volviera viral y me identificaran. Un poco de publicidad nunca cae mal.
- Soy Aurora Lavender, montón de pajizos --gritaba riéndome a carcajadas--
Eso terminó de enloquecer a Mariano, me follaba con una sonrisa que no le vi en toda la noche, sin parar de tomar fotos. Yo me cogía de su cuello y él aprovechaba para darme palmadas en las nalgas, pero tan rápido como podía me volvía a tomar de la cintura. Enloqueció al igual que yo y empezó a gritar mientras me follaba.
- ¡Ho Ho Ho!¡Feliz Navidad! ¡Feliz Navidad Hijueputas!
Al fin se había relajado, olvidado de tanto dolor y estaba disfrutando, no pensaba, solo dejaba seguir el curso a las locuras que vinieran de su mente. Me bajé del balcón, me hice de rodillas y le arranqué el condón, abriendo la boca y masturbándolo con ambas manos.
- ¡Dámelo! ¡Dámelo! ¡Dame tu leche Santa!
Me empujó contra una de las esquinas del balcón y allá me metió su miembro en la boca. Abrí tanto como pude, pero de verdad me tocaba quedarme quieta porque no me daba para siquiera cerrar los labios contra su miembro. Me cogió del pelo y me folló brutalmente la boca. Dio dos pasos atrás alistó su cámara antes de disparar, le abrí la boca, saqué la lengua y junté los senos.
Se masturbaba agitando su miembro, sin cerrar los ojos y muy pendiente de su cámara, el primer chorro cayó directo entre mis ojos, otro entre la boca y la nariz, otro en mi seno derecho y el último cuando cerró los ojos en el pelo.
Se me erizó todo con ese baño de semen en público y me dejó peor de caliente. Me vi toda embadurnada, recogí con los dedos el semen que no cayó en el lugar que lo había pedido y me lo metí a la boca saboreando su leche mirando directo a su miembro al que me le tiré con hambre para escurrir en mi boca lo que le quedó colgando.
Me separó empujándome de la frente y caí sentada contra la esquina, se acomodó en cuclillas y se dedicó a tomar y tomar fotos de su semen regado por todo mi cuerpo hasta que se cansó.
- Fue un placer Teresa ¡Ya te podés ir!
