Contarlo, era como volverlo a vivir y ahora que tenía conciencia mucho peor. No fue difícil tener un orgasmo solo acariciándome y mucho menos con un público que me decía que los tenía masturbándose con esa historia, es algo que me pone peor de caliente.
Probé mis dedos llenos de fluidos, les mostré las 5 fotos impresas a los que quedaban y les pedí que me enviaran por privado sus direcciones para hacérselas llegar. Me pase las fotos por la vagina para que se enloquecieran pensando que les iban a llegar con mi olor y sabor. Me despedí con un beso y terminé la transmisión.
Las manos me temblaban porque a parte de la resaca, no había comido nada y le seguía exigiendo orgasmos a mi cuerpo. Llamé por el citófono a la portería y con solo mencionar el apartamento a los 10 minutos ya tenía una persona subiendo mi comida en un carrito como si se tratara de un hotel 5 estrellas.
Coloqué un poco de música, me di una buena ducha de agua tibia y me relajé en la bañera, usé espuma y sales aromáticas, mi cuerpo deshecho lo necesitaba. Además, una oportunidad como esta no la tengo todos los días. El silencio, la privacidad, la paz que había en ese apartamento era algo que no pensaba desaprovechar.
Encontré mi ropa doblada en el vestidor del baño, apagué la TV y saqué la memoria. Mientras me terminaba de maquillar en la sala miraba con más detalle el collage de fotos, buscando el lugar perfecto para poner la mía.
De las cinco fotos había tres fotos que me gustaban para él:
- Una que me tomó cuando me quedé dormida en su cama, no sé si al amanecer o cuando él despertó. Parecía un angelito, igual que las redes sociales, que fácil es engañar a alguien con solo una imagen.
- Una que tenía el cuello apretado por la extensión, las luces punzando mi piel, su pulgar en mis labios y la mirada perdida que me encantaba.
- La otra acostada con las piernas abiertas las extensiones apretadas al cuerpo, los labios de mi vagina iluminados por la luz que estaba entre ellos y una más abajo perfectamente alineada con mi asterisco, los senos enrollados con los pezones duros a punto de explotar mirando al cielo, la espalda arqueada y el perfil de mi barbilla.
Estuve tentada a dejar las dos últimas, pero ya les había prometido enviarlas. Decidí escoger la última porque recordé su mirada de pervertido cuando me estaba tomando esas fotos. Le di la vuelta, marqué un beso con el labial y le escribí.
"Feliz navidad Santa.68Please respect copyright.PENANAQXpeCiMCMK
Att: @AutoraLavender2"
Tomé un pin y la coloqué justo en el medio donde todos la pudieran ver. La otra foto se la envié a "CumbiKAM" una seguidora de España con la que he tenido varias sesiones privadas y que me pone como un tren con sus conversaciones. El resto les di la vuelta, las marqué con su usuario aleatoriamente y un regalo extra por ser tan fieles.
"Cuando la recibas, avísame. Tendrá acceso exclusivo durante una semana al pack de fotos antes que los demás y una sesión de media hora para divertirnos".
Las metí en los sobres, les pasé la lengua para sellar los sobres y me acordé de todas las veces que hice lo mismo con el fotógrafo.
Salí del apartamento. Cerré la puerta, me apoyé de espaldas y suspirando dije en voz alta:
"Feliz Navidad, Aurora68Please respect copyright.PENANAvRKmByX0tq
Feliz y Maldita Navidad!"
ns 15.158.61.48da2