Entre 20 y 30 minutos estuvimos en la autopista regional y cada vez veía como nos alejábamos del casco urbano en dirección al norte. Llegamos a las afueras de uno de los municipios aledaños, salimos de la autopista y tomamos una ruta veredal.
Tomamos una vía más estrecha de subida y más o menos a un kilómetro, se encontraba un retén militar con hombres fuertemente armados, los cuales no parecían ser ni de la policía ni del ejército y me empecé a asustar.
Nos detuvimos, bajaron los vidrios, mientras unos de ellos inspeccionaban el carro por debajo con unas varas largas con espejos y unos perros que daban vueltas al rededor.
- Señor Iván, señorita Erika, buenas noches74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡobsNDko3lH
- Buenas noches ¿cómo están?74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡiWw6bb8f4i
- Muy bien, señor
Se percató de que había una persona más con ellos y me solicito mi documento. Yo ya ni sabía qué hacer.
- Solo es para el registro --dijo Erika con una sonrisa--
Escaneó el código con un lector en su tableta, comparó una foto mi coincidencia.
- Liliana Espinoza Duarte, profesora de Maestría, Universidad del Oriente. Nacida el 29 de febrero, oriunda de Medellín, madre Consuelo y padre Rodrigo.
Deslizo con su dedo la tableta y continuó leyendo en vos alta un montón de datos privados o que creía que lo eran. Se detuvo, frunció el ceño y me temía que fuera a encontrar lo de mi visita al psiquiátrico.
- ¿Por qué hay una consulta reciente de antecedentes?74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡREQClF3M15
- Una requisa de rutina por un accidente en la autopista74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡLizMDm9Y0v
- De acuerdo74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡj9F0KnKF8J
- Motivo de la visita74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡE8RT0Ex9OV
- Negocios74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡ4NKiZ7gr5v
- ¿Cuánto tiempo se va a quedar?74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡUOKskrOZoh
- El fin de semana74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡykM6poRoiv
- Una noche --contesté desde atrás--
Bajó su tableta y se paró firme como un soldado danto la instrucción para abrir la puerta.
- Que tengan feliz noche
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Por fortuna no cerraron las ventanas y el aire me ayudaba a respirar mejor, si no creo que me hubiera desmayado. Empecé a ver casa, fincas bastante lujosas, bastante espaciadas la una de la otra. La subida se hacía cada vez más empinada y a su vez menos poblada.
Ahí iba de nuevo mi paranoia y ya estaba a punto de entrar en crisis. Me imaginaba amarrada, montada en un avión, drogada y vendida a cualquier asiático como trata de blancas. Erika volteó a mirarme y se asustó un poco.
- Iván puedes parar un momento
Se orilló a un costado de la vía y se detuvo. Lo primero fue mirar donde estaban los seguros, abrió la puerta y me revisó.
- ¿Estás pálida? ¿Te encuentras bien?
Me soltó el cinturón y vi la oportunidad perfecta de escapar.
- Erika es hija de un ex-coronel del ejército --dijo Iván mirando por el retrovisor--
Respiré profundo y descansé un poco. Ella se rio, tomándome de la mano e invitándome a bajar.
- Tomemos aire un momento, te va a hacer bien
Nos apoyamos de espaldas al vehículo, mirando a lo lejos las luces de la ciudad. Iván sacó un par de botellas de agua y nos las ofreció para que tomáramos un poco.
- Me disculpo, ellos pueden causar una impresión equivocada74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡHINzQtSpcO
- Fresca, lo entiendo, pero como no tenían insignias de nada me imaginé lo peor74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡFx51KMB8Pk
- Si, se nos olvidó contarte de ese pequeño detalle, pero es que igual no podía, no puedo hablar con nadie sobre este lugar o sobre mi papá, es peligroso74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡGMtMgy1V3n
- ¿Por qué?74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡQV6lRtsDeU
- Nos han intentado secuestrar y por eso mi papá prácticamente nos obligó a vivir acá sin nos queríamos quedar en el país74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡ4ZpYerii6v
- ¿Por eso los hombres de la puerta?74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡwOkodybt6p
- No solo por nosotros. Esta villa la mandaron a construir entre militares retirados y empresarios, cuando la situación se puso fea en el país. Es más, vos ni lo vas a notar pero todo el borde de esta montaña tiene personas vigilando74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡV85aijJDE4
- No se si sentirme tranquila con eso o más preocupada74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡqFGW5fo20j
- Relax, estamos en el lugar más seguro de la ciudad, no te va a pasar nada, bueno --sonrió con picardía-- nada que no quieras
La miré con ganas de abrazarle y darle un beso, me encantaban esos ojitos saltones e inocentes, fui demasiado evidente en mis intenciones.
- Acá no74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡN6WFWv0KPW
- ¿Por qué no?74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡXfKjJSKLno
- Porque hay ojos en todas partes74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡtYkl78T0Qr
- Entonces vamos a un lugar más privado
Emprendimos de nuevo la marcha, y mientras continuábamos por la ruta me contaban que su casa no era tan elegante como todas esas otras que habíamos visto en el camino, es más, eran algo así como los más "pobres" de la villa y por eso la de ellos era la última de todas.
- Pero lo bueno es que tiene una vista, espectacular
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Se abrió una puerta eléctrica y entramos bajando por unos rieles, aparcando el carro debajo de un edificio blanco rodeado de cristales de tres plantas y me quedé sin palabras. Yo quiero ser igual de "pobres" que ellos.
Un par de gran danés con collares de cuero gruesos en sus cuellos se acercaron ladrando, afortunadamente se sentaron meneando sus colas porque sus cabezas quedaban por encima de las ventanas.
- Ellos son Aquiles y Ajax74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡHROmciEHp3
- ¿Y los "perritos" ya comieron?74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡKUh45NYbbo
- No te preocupes, son literalmente unos bobos grandes74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡAKwqeeOb6H
- De acá no me bajo, no, ni por el putas, me comen de un solo mordisco
Iván se bajó del vehículo, les sobó la cabeza, les pidió que le dieran la pata y luego, con un movimiento de su brazo, pasaron por el lado de la piscina y se perdieron en la oscuridad.
Me abrió la puerta y ofreció su mano para ayudarme a salir. Me tomó por la cintura con propiedad y me llevó hasta unas escaleras que subí al lado de Erika hasta la segunda planta.
Lo primero que vez te impacta, toda la cara posterior da una vista completa de la ciudad. Erika presionó un botón y los vidrios se abrieron hasta los costados, convirtiendo la estancia en un balcón enorme.
Como hipnotizada camine hasta allá y me apoyé de la baranda y respire profundo llenando mis pulmones de aire puro. Erika se hizo a mi lado apoyando sus codos.
- Me encanta este lugar, silencioso y callado74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡSzj1Y33vOI
- Hacer yoga acá debe ser espectacular74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡda2VV6sV13
- No sabía que te gustaba, a mí a también
Iván se encargó de prender el fuego, bueno, eso es mucho que decir, algo nada barbárico, más bien una mesa de piedras en medio de la sala alimentada por gas. De la cocina abierta que quedaba ahí al lado, saco un vino de la despensa y sirvió tres copas.
Erika me tomo de la mano para llevarme a su lado y me invitó a tomar una para proponer un brindis.
- Por más días del "Si", por más días como este --dijo Erika--74Please respect copyright.ＰＥＮＡＮＡLWxvWZHuBn
- Por las nuevas amistades --dijo Iván--
Chocamos nuestras copas y como al parecer ninguno de los dos se atrevía a decirlo, yo fui más directa y explicita. No quería más palabras, no quería más historias, no quería más sustos, iba a brindar por lo único que anhelaba y necesitaba.
- Por una inolvidable noche llena de sexo, deseo y lujuria
